Columnas
El futbol mexicano se ha caracterizado por gran pasión y amor por los colores de los diversos equipos que conforman las diferentes categorías, y más allá de figuras, goles, ambiente y hazañas, se ve manchado por la violencia y el caótico comportamiento de las llamadas Barras que tienen acto de presencia en los estadios del país, la cuales, se han visto involucradas y han sido protagonistas de actos sin precedentes en el balompié nacional.
Debido a esto, la presencia e incremento de elementos de seguridad en los partidos de futbol ha sido elemental, ya que ha funcionado para cubrir, encapsular, defender, bloquear, separar e incluso repeler grupos peligrosos, esto por medio de Granaderos, quienes en cada evento deportivo con cierto nivel de riesgo, en cuanto a posibles enfrentamientos, han sido parte fundamental para este tipo de situaciones.
Por más extraño que parezca, la jefa de gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, ha hecho realidad una de sus promesas, la cual, era desaparecer el mencionado cuerpo de seguridad, pero lo que viene a la mente, después de este cambio, en torno a los eventos deportivos, es ahora ¿quiénes resguardarán los eventos considerados de alto riesgo?
Es curioso incluso, ya que para el juego de hoy, entre Pumas y América en el Estadio Olímpico Universitario, como parte de las semifinales del Torneo Apertura 2018, en duelo de ida, no habrá granaderos. Sí, extraño, pero ¿efectivo? Mientras que para algunos, estos mismos elementos causaban miedo por no saber cómo reaccionarían en una trifulca, a otros les resultaba un respiro verlos fuera de los inmuebles deportivos.
Por poner un ejemplo, y del mismo estadio de los Pumas, para querer ingresar, ya sea un duelo ante Chivas, América u otro equipo, lucían largos caminos de granaderos para entrar y dividían a las barras de la afición en general, no se diga el seguidor que portaba la playera del rival, escenas que a partir de esta nueva designación, no sé cómo vayan a terminar.
Y volviendo a quiénes entraran al quite, la propia SSP indicó que durante los encuentros de ida y vuelta, en la reciente campaña, ha participado policías de proximidad y montada, metropolitana, de tránsito, bancaría e industrial, auxiliar, así como del escuadrón de rescate y urgencias médicas, además del agrupamiento llamado cóndores, todos ellos, serán quienes tomen las riendas de la seguridad en los estadios de la Ciudad de México.
El tema de seguridad y su relación con la violencia en los estadios, sobre todo en la capital, donde se albergan dos de las barras más fuertes del futbol nacional como lo es la de América y Pumas, siempre es un tema a considerar; a pesar de esto, el balompié azteca busca que las familias acudan sin temor a un inmueble deportivo para apoyar a su equipo.