¿Hay favorito en la final?

El sábado estaba convencido de que Cruz Azul era amplio favorito para quedarse con el Apertura 2018. El domingo cambié de opinión con la aplanadora del América. Ahora realmente no sabría decir quien lleva las de ganar en la Gran Final.

Cruz Azul fue el candidato de todo el torneo, casi siempre apareciendo como líder y en la liguilla hizo valer esa condición. El América también tuvo un rendimiento constante, aunque de pronto las formas le costaron más de una crítica a Miguel Herrera.

En el caso de La Máquina, algo que he admirado las últimas semanas es la mentalidad. Cuando llegó el silbatazo final el sábado, Caixinha salió disparado como loco a festejar sobre la cancha. También, tras ganar la Copa Mx, los jugadores al recibir su medalla no se cansaban de repetir que apenas era el primero de 2 títulos, muy convencidos de todo.

Ese aspecto siempre será crucial, más en una institución que ha sufrido lo que el Cruz Azul. El domingo luego de unos minutos de acabado el América-Pumas, varios jugadores entre ellos Roberto Alvarado, twittearon nuevamente sus ganas de jugar ya por ese título.

Eso se ha contagiado a la afición. La gran mayoría no ha negado que quería al América en la final, casi todos por revancha del Clausura 2013. Durante el torneo regular hasta el propio Rafa Baca lo llegó a mencionar en conferencia. Muchos de esos fanáticos han asegurado que el guion que se ha ido escribiendo es perfecto para romper la sequía de 21 años.

Las Águilas tuvieron sus tropezones al arrancar el torneo. A la afición el funcionamiento del equipo le dejó dudas incluso con victorias. Aquella caída con León encendió las alarmas, pero ahora, resulta que es la derrota más reciente del cuadro de Miguel Herrera, quien por cierto ha sabido moverse entre los cuestionamientos.

En muchos lapsos del torneo llegué a criticar al Piojo por no tener variantes, cosa que fue perfeccionando hasta jugar con el parado táctico en las últimas fechas y con su rotación de jugadores que tomó por sorpresa a Pumas, basta ver los movimientos de Jorge Sánchez en la semifinal de vuelta para apreciar ese trabajo táctico.

América viene de menos a más en el campeonato y eso puede hacer que llegue con una mejor inercia. Y también en el tema mental está fortalecido. Aún con el empate en la ida ante Pumas, Herrera y sus jugadores lucían muy tranquilos, como si supieran a la perfección que su potencial les daría para golear como terminaron haciéndolo.

Se me acaba el espacio y no habrá tiempo de hablar de las deficiencias de ambos, que sí las tienen. Tampoco de los errores de sus rivales. Pero quizá no sería justo hacerlo. Nos esperan dos partidazos. Con equipos tan aceitados, la definición llegará inevitablemente de un error grave de alguno de los protagonistas, lo que podría hacer más doloroso ese desenlace.