El Consejo de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) consideró como un “retroceso” la política migratoria aplicada por el Gobierno del Presidente Andrés Manuel López Obrador.
La denuncia fue hecha por la alta comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, quien externó su preocupación por las políticas migratorias implementadas en México, Estados Unidos y algunos países de Centroamérica para contener el flujo de personas.
“En particular, me alarma que los niños migrantes continúen siendo detenidos en centros tanto en EU como de México infringiendo el derecho superior del niño, un principio fundamental del derecho internacional”, expresó.
Explicó que la migración de las familias que abandonan su lugar de origen se debe a factores como la corrupción, la inseguridad, problemas sociales y el cambio climático.
“Las políticas y prácticas que tienen como objetivo evitar fisicamente que los migrantes lleguen y entren al país destino, o que los devuelvan sin las garantías del debido proceso, son simplemente retrocesos”, sentenció.
Bachelet indicó que como parte del acuerdo migratorio entre EU y México para detener la migración hacia Unión Americana, su oficina en Guatemala, Honduras y nuestro país ha documentado un aumento de las detenciones y deportaciones de migrantes.
“Hemos observado casos de separación de familias en un contexto de privación arbitraria de la libertad, ausencia de evaluación individual, denegación de acceso a servicios y asistencia humanitaria y un uso excesivo de la fuerza contra migrantes”, dijo.
Agregó: “Esto lo único que logra es presionar a las familias desesperadas para que tomen rutas más peligrosas, quedando más expuestas a violencia física, la trata de personas, la violencia sexual y otros delitos”.
Dijo que en lo que va de 2019 se han registrado 35 mil casos de solicitantes de asilo, que han sido enviados de vuelta de EU a la frontera con México a la espera de una audiencia judicial.
Redacción ContraRéplica
Foto Cuartoscuro