Acusan a MP de filtrar datos a la Viuda Negra

Al cumplirse dos meses del homicidio de los tres miembros de la familia Quezada, amigos y familiares acusaron que el ministerio público que lleva el caso, no sólo no ha avanzado en él, sino que se ha dedicado a filtrar información a la principal sospechosa de haber organizado y ordenado el crimen ocurrido en la alcaldía Gustavo A. Madero.

“Eso sólo nos habla de corrupción. Cómo puede ser que han pasado dos meses y no hay nada de avances. Liberaron a la responsable por sus corruptelas, y ahora resulta que ya ni van por ella y que sólo le están pasando información de cómo van las investigaciones”, aseguró Luz Ortiz, cercana a la familia.

El pasado 4 de abril el empresario Jacobo Quezada, su hijo Jacobo y su hija Patricia, fueron asesinados dentro de un gimnasio de su propiedad. La principal sospechosa de organizar el crimen era su esposa, Berenice Alanís.

Hace años, la mujer fue empleada doméstica de los Quezada. Después se convirtió en la pareja del empresario, quien la incluyó en su testamento. Sin embargo, el hombre descubrió dos infidelidades y la eliminó de los herederos.

▶ Eso, apuntan las investigaciones, fue el motivo principal por el que Berenice Alanís, planeó el homicidio de su pareja y sus hijos.

Y aunque fue detenida tras el crimen, un juez consideró que el actuar del Ministerio Público encabezado por el fiscal Óscar Tonatiuh Vázquez no cumplió con los requisitos necesarios para calificar de legal la detención y ordenó liberarla.

Ahora, dos meses después del crimen, cercanos a la familia denunciaron que no hay mayor avance en las indagatorias.

Acusaron a la ministerio público, Montserrat Oropeza Coyotzi, de mantener en el archivo el expediente y de avisarle a Alanís sobre las actuaciones que han tenido.

Los mismos familiares revelaron imágenes de un Corvette que era propiedad de Jacobo hijo, una de las víctimas, y que fue robado por la sospechosa del crimen sólo unas horas después de que quedó en libertad.

El carro, aseguran, ahora acostumbra a verse entre la CDMX e Hidalgo, que es donde vive aquella mujer.

El auto forma parte de una colección valuada en 20 millones de pesos que ella se llevó en menos de 24 horas tras quedar libre por los errores de la PGJ. A dos meses del triple homicidio, el caso continúa en la impunidad.