CINECRÍTICA
La Claqueta
Por Osvaldo Córdova
Si lo tuyo son las películas de ciencia ficción, en especial las de viajes espaciales, como “Interstellar” o “Gravity”, entonces, “Ad Astra, hacia las estrellas”, protagonizada por Brad Pitt, hará que renueves tu gusto por este género de cine.
Estrenada unos meses después del 50 aniversario de la llegada del hombre a la Luna, James Gray nos presenta su epopeya sobre el universo, la cual nos lleva a un futuro cercano: los viajes cotidianos a las colonias lunares, al tiempo que nos deja ver la crisis existencial que vive un astronauta.
En “Ad Astra, hacia las estrellas” conoceremos la historia de Roy McBride, interpretado por Pitt, quien ha vivido a la sombra de su heroico padre Clifford, quien en una misión espacial para encontrar inteligencia artificial desaparece en el universo.
Sin embargo, 30 años después la Tierra comienza a recibir oleadas de rayos cósmicos que propician accidentes y muertes masivas, lo que hace sospechar que son enviados por la misión comandada por Clifford, personificado por Tommy Lee Jones.
Ante esto, Roy es requerido para viajar hasta Marte, con la intención de contactar con él y solicitarle que pare el envío de esos rayos que podrían destruir el planeta.
Y es precisamente durante ese viaje donde nuestro protagonista nos muestra la dicotomía en la que vive; por un lado, lamenta el deterioro que la era espacial ha ocasionado a la Tierra y ahora a la Luna, “somos devoramundos”, dirá en uno de sus diálogos.
Pero también nos deja ver ese anhelo familiar del que careció desde la desaparición de su padre y la necesidad de superar esa pérdida para conformarse a sí mismo, y es aquí donde Gray le da un tratamiento más fantasioso a la cinta para ubicarse en la ciencia ficción.
Son es esas escenas en las que vemos a un Brad Pitt, solitario, frío y esimismado reflexionando sobre las preguntas existenciales que enfrenta la raza humana y que le devuelven esa humanidad que parecía había olvidado, lo que le valió que la crítica lo considere como una de sus mejores actuaciones al grado de considerarlo para estar nominado en la próxima temporada de premios.
Y es que desde “Gravity”, las reglas del juego de ciencia ficción cambiaron para dejar atrás aquellos escenarios que nos impresionaban por lo fantasioso que eran, ahora parece ser que el género dio un giro para mostrarnos una visión realista de como es el espacio.
Tan es así que Gray, en el festival de Venecia, donde se estrenó “Ad Astra, hacia las estrellas”, la presentó como “la representación más realista del espacio”, y no se equivocó, pues la fotografía de la película nos muestra unos encuadres envolventes, que combinados con fotos reales de la Luna y los ingeniosos efectos visuales pareciera que estamos viendo realmente el espacio.
Pero el director, explota también de una manera muy real ese futuro no muy lejano, que es la comercialización de los viajes espaciales, el dejar atrás por un tiempo los conflictos en la Tierra para ir a pasar las vacaciones a una de las más maravillosas colonias en la Luna.
Es así que “Ad Astra, hacia las estrellas” es una exploración sobre el espacio dejado por un padre ausente y el vacío infinito del universo real.
Foto 20 Century Fox