Los productores mexicanos de jitomate, ní las manos pudieron meter ante la imposición de 17.5 por ciento de arancel a su producto ordenado por el presidente Donald Trump, ante la presión de los productores del Estado de Florida a esta hortaliza.
El año pasado, las ventas del producto al vecino del norte superaron 2 mil millones de dólares. Hay que destacar que México se ubica como el mayor exportador de jitomate con poco más de 3.5 millones de toneladas anuales (datos de 2018).
Los productores de jitomate de Florida le dijeron a su presidente que honrara su frase de campaña “America First” (Estados Unidos primero) y, que les ayudara con un incremento de aranceles para el jitomate que viene de México. Con ello la eliminación del Acuerdo de Suspensión, lo que implica que el Departamento de Comercio Estadunidense reactivará la investigación antidumping, suspendida desde 1996, y su determinación final la deberá emitir a más tardar el 19 de septiembre de 2019.
Asimismo, la Comisión de Comercio Internacional de Estados Unidos, emitirá 45 días después su determinación final del daño a la industria, lo que puede suceder alrededor del 1 de noviembre de 2019.
Con ello se definirá ya sea la aplicación definitiva de impuestos antidumping a la exportación de jitomate a los Estados Unidos, o bien, se volverá al libre comercio en este producto.
El Acuerdo de Suspensión, que funcionó desde 1996, reguló por 23 años de manera exitosa las exportaciones mexicanas de jitomate al mercado estadunidense, a la vez que permitió a los productores mexicanos aprovechar las ventajas comparativas que tiene nuestro país para la producción.
Un estudio de la Universidad de Arizona señala que los consumidores de jitomate estadunidense resultarán afectados pues, tendrán que enfrentar un incremento de precios de entre 38 y 70 por ciento como resultado de la terminación del Acuerdo y, de la aplicación de derechos compensatorios provisionales.
La embajadora mexicana, Martha Bárcena, tendrá una dura prueba por superar en Washington, sobre todo si consideramos que México no es parte de este Acuerdo de Suspensión y, no puede participar en sus negociaciones.
La Comisión Internacional de Estados Unidos debe emitir una decisión final a más tardar en noviembre de este año, y será entonces cuando se sabrá si se aplica de manera definitiva la cuota compensatoria a las exportaciones del jitomate hacia el vecino país del norte o se resuelve en favor del libre comercio del producto mexicano.
Con este reciente arancel al jitomate, están en riesgo 400 mil empleos directos y más de un millón de indirectos de la industria mexicana. Los buenos oficios de los negociadores aztecas tienen que volver por sus fueros, es mucho lo que esta en juego, mucho.
•Doctora en Relaciones Internacionales
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