Balance del primer periodo

De lo anterior destacan: la legislación secundaria correspondiente a la reforma constitucional en materia educativa; la reforma al artículo 28 constitucional para prohibir la condonación de impuestos; la reforma a los artículos 108 y 111 constitucionales cuyo objeto es precisar que el Presidente de la República puede ser acusado por actos de corrupción, delitos electorales y por los ilícitos contenidos en el artículo 19 de la Carta Magna; la reforma a los artículos 116 y 127 en materia de remuneraciones de los servidores públicos, con la cual ningún funcionario podrá percibir un salario mayor al del titular del Ejecutivo federal; así como la reforma constitucional en materia de revocación de mandato y consulta popular, que involucrará más efectivamente a la ciudadanía en las decisiones relevantes de la vida pública, obligando a los gobernantes a escuchar y tomar en cuenta la opinión de los gobernados.

Resalta también la aprobación de la Ley Federal de Austeridad Republicana, la cual deberá ser una herramienta para hacer más eficiente la operación del Gobierno, promover el ahorro de recursos y orientarlos a la satisfacción de necesidades generales; de igual manera, será importante el efecto positivo que en la hacienda pública puedan producir las reformas para endurecer las sanciones en contra de la defraudación fiscal, como la emisión de facturas que amparan operaciones inexistentes.

En cuanto a la agenda particular del Partido Verde, este periodo alcanzamos tres importantes logros: castigar los ataques cometidos en contra de las mujeres con el fin de lastimar su cuerpo, mutilarlo o dejarle cicatrices permanentes, tanto físicas como psicológicas; reformas a la Ley General en Materia de Delitos Electorales para identificar y sancionar los casos donde se presente violencia política por razón de género; y, el más importante de todos, crear una ley que permita disminuir la tasa de mortalidad por cáncer en las niñas, niños y adolescentes, a través del desarrollo de políticas públicas, planes, programas y protocolos destinados a la detección temprana, tratamiento integral de calidad y recuperación de los pacientes.

No obstante, los logros alcanzados, aún quedan temas pendientes de gran relevancia por resolver, especialmente los relacionados con la estrategia para hacer frente a las actuales circunstancias que vivimos en el país en materia de seguridad y justicia, lo cual, sin duda alguna, deberá ser la más alta prioridad del Poder Legislativo para el próximo año. Solo así podremos las y los legisladores cumplir nuestro compromiso con la ciudadanía.