El Presidente brasileño Jair Bolsonaro negó hoy estar vinculado con las acusaciones de la Fiscalía de Río de Janeiro contra su hijo el senador federal, Flavio Bolsonaro, por su presunta participación en una red de lavado de dinero desviado de la Asamblea Legislativa.
La investigación iniciada en julio de 2018, a tan solo cuatro meses previos a las elecciones generales, vincula a Fabricio Queiroz, policía y amigo del Presidente, con su hijo Flavio Bolsonaro por el ilícito cometido.
El Ministerio de Hacienda reveló que Queiroz recibió regularmente ingresos de los empleados del hijo del Presidente cuando ocupaba el escaño de la Asamblea Legislativa entre 2003 y 2018.
También el Ministerio Público de Río acusó hoy al senador Flavio Bolsonaro tras tener “indicios” de que él y su mujer “pagaron en efectivo de forma ilegal 638 mil reales (157 mil dólares) por la compra de dos inmuebles en Copacabana”, informa el diario Folha de Sao Paulo.
Los fiscales han detallado que Flavio utilizó la “rachadinha", o coacción de sus asesores, para devolver parte de su salario a los diputados que les contrataron. Dinero que habría sido utilizado para comprar propiedades.
Desde la llegada de Bolsonaro, el caso Queiroz está frenado debido a que uno de los pagos sospechosos realizados por el exasesor del senador Flavio, involucra un cheque emitido en nombre de la actual primera dama, Michelle Bolsonaro.
Con información de Notimex
Imagen: Reuters