Buscan al asesino del alcalde... entre muertos

La Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) busca al joven que baleó al presidente Municipal de Valle de Chalco, Francisco Tenorio, en la zona de Tláhuac… y entre los muertos de la Ciudad de México.

Las autoridades que le siguen la pista revelaron que indagan si aquel sujeto que primero le pidió, una foto al alcalde, luego un aventón, y finalmente lo baleó, pudo ser asesinado y abandonado en algún punto de la capital del país.

Autoridades de la dependencia que encabeza Alejandro Gómez Sánchez revelaron que una de las líneas de investigación los llevó a la colonia Selene, en Tláhuac.

Sin embargo, tienen otra hipótesis que los hace suponer que podrían haberlo asesinado.

Este fin de semana, las autoridades mexiquenses solicitaron la colaboración de las capitalinas para tratar de ubicar a este hombre.

Los datos que han obtenido indican que tiene entre 17 y 19 años de edad.

Tras la solicitud de colaboración de la fiscalía estatal, la Policía de Investigación ordenó a sus coordinadores de las 16 Fiscalías Desconcentradas revisaran si tenían, entre sus hallazgos, a un hombre que fuera menor de 30 años de edad, moreno y sin identificar.

Les ordenaron revisar notificaciones hospitalarias, hallazgos en vía pública, parajes, caminos, terrenos baldíos…

Hasta ayer por la noche, ninguno había ubicado algún cuerpo que pudiera coincidir con la solicitud hecha.

Fue el martes pasado cuando el alcalde de Valle de Chalco, Francisco Tenorio, sufrió un ataque a tiros.

Aquella mañana dos jóvenes que estaban en el fraccionamiento Geovillas de la Asunción se le acercaron.

Quienes estaban en el lugar cuentan que primero le pidieron una fotografía.

El edil aceptó y los abrazó uno por uno, mientras que uno de sus asistentes captaba la imagen con un teléfono celular.

Las fotografías servirían después a las autoridades policiacas, para poder identificarlos.

Cuando terminó el evento, el edil estaba por irse, pero uno de los jóvenes le pidió que le diera un aventón. El alcalde aceptó y lo subió a su camioneta en la que iban también su chofer y su secretario particular.

Al alcalde le dispararon en la cabeza al menos dos balazos, a su asistente, le dieron un tiro en la quijada. Tras agonizar por días, el fin de semana finalmente falleció.

Después de la agresión, el hombre bajó y escapó. Entre las líneas de investigación, indagan si tenía alguna relación con amenazas que sufrió por parte del Cártel de Tláhuac.