POR MARÍA CABADAS
México debe de poner al centro de
cualquier política, como la comercial o la económica a la persona, debe pensarse que antes que migrantes son seres humanos, dijo el presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), Luis Raúl González Pérez, quien agregó que el tema de los flujos migratorios no debe tratarse como un problema de seguridad nacional o de seguridad pública.
“Debemos de poner en el centro
de cualquier política por muy importante que sea como la comercial o la económica a la persona, la dignidad que debemos pensar que antes de ser migrantes son personas y que el trato humanitario que México ha caracterizado y ha tenido siempre no se pierda, que no veamos la migración como un problema de seguridad pública o de seguridad nacional”, señaló.
Luego de su participación en la inauguración del conversatorio sobre
Reparación Integral de Daño en casos de violaciones graves a derechos humanos en México, el ombudsman llamó al Gobierno federal a que no se pierda el trato humanitario que ha tenido siempre hacia los migrantes.
Y es que González Pérez argumentó que los flujos migratorios no deben
verse “como un problema de seguridad pública o de seguridad nacional. Sí, es una potestad del Estado regular la migración para que sea segura, ordenada y regular, pero sin que expongamos a los indocumentados a buscar rutas más inseguras que los violenten en sus derechos o a las mujeres expuestas a mayores vejaciones”.
Además, respaldó la postura del
canciller Marcelo Ebrard, al señalar que México no debe permitir ser tercer país seguro.
“Celebro que así sea la firmeza del
Gobierno, de no ser un tercer país seguro, que tenemos problemas en la seguridad y tercero, que veamos nuestras reales capacidades de atención, porque la política que hemos observado también de brazos abiertos mostró que no tenemos la infraestructura para la atención en el sur de nuestro país, pero también en el norte.