La semana pasada el gobernador de Puebla, Miguel Barbosa, miembro del Movimiento Regeneración Nacional (Morena), durante un mitin en Huejotzingo, Puebla, dijo que
tardó 19 meses en llegar al 2 de junio de 2019, fecha en que se llevaron a cabo las elecciones extraordinarias en Puebla, y “la lucha fue a machetazos porque nos querían extinguir.
No pudieron detenernos y con la ayuda de ustedes ganamos porque yo gané, me la robaron, pero ¡los castigó
Dios!”. Haciendo referencia al accidente en el que murió la gobernadora Martha Erika y su esposo el coordinador de los Senadores del PAN, Rafael Moreno Valle.
¿Qué quiso decir el gobernador Barbosa con “la lucha fue a machetazos”? ¿Tendrá que ver con el asesinato
de la gobernadora?
Como resultado de las declaraciones de Barbosa,
medios de comunicación, partidos políticos, senadores de la República y diputados de todos los partidos manifestaron su inconformidad y condenaron lo dicho de manera, por demás, irresponsable, por decir lo menos.
Resulta increíble que sigamos sin tener resultados
de la investigación del accidente o atentado, a casi un año en que la gobernadora de Puebla y Moreno Valle murieran tras desplomarse el helicóptero en el que viajaban el 24 de diciembre de 2018, en el Triángulo de las Ánimas, en Puebla.
Según lo dicho, el 25 de diciembre pasado, por el
secretario de Seguridad, Alfonso Durazo, “la aeronave se encontraba en vuelo, a unas tres millas náuticas al norte del aeropuerto de Puebla cuando, según las declaraciones del propio secretario, sufrió una aparente falla, lo que ocasionó que se precipitara al terreno” en Santa María Coronango, Puebla. Como resultado del accidente la aeronave quedo calcinada
En diciembre del año pasado el Presidente Andrés
Manuel López Obrador dio instrucciones a su gabinete de iniciar de inmediato las investigaciones correspondientes y de otorgar los apoyos necesarios tanto al gobierno del estado como a los deudos.
Parece que no han atendido la orden del Presidente,
porque se supone que han hecho una investigación sobre los hechos citados, las fuerzas de seguridad del Gobierno federal, el Ejército, la Policía Federal, el Ministerio Público, peritos de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, y no obstante que tantas autoridades investigan el hecho, AUN NO CONCLUYEN NADA COMO RESULTADO DE LA INVESTIGACIÓN.
Es muy extraño que después de tanto tiempo no
podemos saber los motivos del magnicidio, ni tenemos los nombres de los responsables. ¿A quién benefició ese hecho? ¿Será a Barbosa?
Miguel Barbosa en lugar de estar haciendo esas
lamentables declaraciones en contra de personas que ya fallecieron y que no se pueden defender, debería cumplir con su tarea como poblano y como gobernador, que es exigir al fiscal general de la República, Alejandro Gertz Manero, y al titular de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), Javier Jiménez Espriú, que informen de manera puntual en qué relativo al avionazo.
•Especialista en Derecho Constitucional y Penal