Chavismo investiga cuentas de Guaidó para inhabilitarlo

POR RUBÉN MACHAEN

Tras las últimas presiones del régimen de Nicolás Maduro hacia el presidente encargado de Venezuela, Juan Guaidó, el contralor general de la república, Elvis Amoroso, informó ayer en rueda de prensa de la apertura de un proceso de auditoria patrimonial al también presidente del Parlamento. La medida, según el contralor, es producto de “múltiples denuncias recibidas” por la institución, cuyo origen no reveló.

En su alocución, Amoroso afirmó que Juan Guaidó, presuntamente, primero, "ocultó o falseó datos contenidos en su declaración jurada de patrimonio", y segundo, ha recibido "dinero proveniente de instancias internacionales y nacionales sin ningún tipo de justificación”. Del mismo modo, ratificó que la constitución “establece que los diputados de la Parlamento son a dedicación exclusiva, no pudiendo recibir ningún tipo de remuneración con ocasión de otro trabajo público o privado”, y enfatizó que si alguna de las “faltas” cometidas por Guaidó llegase a “constituir un delito”, la contraloría podría remitir el expediente a la fiscalía para que inicie una investigación penal.

Por ello, destacó que la contraloría, como ente vigilante de la conducta de los servidores del Estado, tiene “facultad para sancionarlos con multas o inhabilitarlos para ejercer cargos públicos” por hasta 15 años.

Sobre la posible inhabilitación de Guaidó, en entrevista exclusiva para ContraRéplica, el abogado constitucionalista venezolano, Juan Manuel Rafalli, afirma que si bien la contraloría está capacitada para entablar inhabilitaciones, éstas “no deberían concretarse si no hay una sentencia penal definitiva”. Rafalli recuerda casos como el del opositor Leopoldo López, quien también fueron inhabilitado porque “el gobierno se vale del uso absurdo de una facultad administrativa para generar sanciones políticas a candidatos opositores”.

De acuerdo al abogado, las palabras de Amoroso son una “amenaza más” que se suma a las últimas acciones de Nicolás Maduro. “Ellos ya apelaron al máximo recurso que tenían desde el punto de vista de los poderes subyugados al servicio del régimen”.

NUEVA ELECCIÓN

A pesar del nuevo embate de Maduro contra la figura de Guaidó, Rafalli invita a leer entre líneas: “una posible inhabilitación a futuro es risible, porque si hay una nueva elección, va a ser sobre la base de un cambio político muy profundo”. Y es que para Rafalli, el único modo de que una inhabilitación los beneficie sería “durante un proceso electoral conducido y dominado por el madurismo y por los factores que están usurpando el poder bajo las condiciones que hasta hace poco ostentaban, situación que, por más que quieran, ya no es así".