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POR ULISES LIBRADO
Los atentados virtuales a cajeros automáticos se han incrementado por falta de medidas preventivas, y ante una seguridad física ineficiente e insuficiente, aunado a que en la Dark Web se pueden encontrar kits de bajo costo que pueden duplicar las transacciones y robar datos.
El año pasado los ciberataques provocaron una pérdida de más de mil 500 millones de dólares a escala mundial, registró un análisis de la firma S21sec.
▶ La empresa de ciberseguridad española destacó que en México se debe priorizar este delito en los sectores de salud, infraestructura y gobierno, pues la administración federal aún no muestra una estrategia de defensa ante la vulnerabilidad en les redes y en el mundo virtual.
También, los ciberataques se harán cada vez más complejos, por lo cual es necesario que las aseguradoras potencialicen sus sistemas e incluyan Inteligencia Artificial, lo que permitirá a las empresas mejorar sus análisis de fraude, tanto interno como externo, detectar y reducir estafadores.
Durante 2018 incrementó la demanda de servicios de ciberseguridad 10 por ciento, por lo que estima que en México crecerá la demanda e inversión en 2019 entre 12 y 18 por ciento, mientras que Latinoamérica seguirá la tendencia de aumento, entre 9 y 14 por ciento.
Resaltó que las pequeñas y medianas empresas (Pymes) empiezan a ser blanco de los ciberdelincuentes, por lo que es necesario que tengan prevención, a pesar de ser pocos trabajadores; adquirir software, que sean comprados de manera legal y respaldar los documentos y archivos, a través de copias de seguridad, de esta manera disminuirán la posibilidad de que los ataques sean efectivos.
Los atentados a dispositivos móviles han aumentado, vulnerando información personal sin que los usuarios se den cuenta; esto debido a los permisos que se otorgan en aplicaciones, el uso de la cámara para escanear códigos QR y visitar publicidad falsa, entre otros.
El peligro también está en que cada vez más personas utilizan bancas en línea desde smartphones, donde registran sus huellas digitales como filtro y brindan una serie de datos que pueden ser vendidos en el mercado negro.