POR MARTHA ROJAS
Hace poco más de tres años
Dharma Books llegó al mundo editorial para demostrar que el tamaño no necesariamente importa cuando se trata de ofrecer a los lectores una oferta que vas más allá de los bestseller y los autores del momento.
Fundada por Nicolás Cuéllar y Raúl
Aguaya, la casa editorial se ha preocupado por tener un selectivo catálogo con arriesgadas propuestas y libros de poesía, que a veces parecerían un suicidio monetario.
Ayer, Dharma Books presentó en
el Salón Covadonga Combate a 10, un ejercicio literario que involucra tanto a autores como a lectores. Se trata de una colección en la que los narradores regresan a sus primeras obras —publicadas hace poco más de una década— para reescribirlas o explicarlas.
“Lo que buscábamos con esta colección era que tanto los escritores como
los lectores realizaran un ejercicio de introspección. Lo que nos propusimos era que los autores que publicaron hace diez años reescribieran parte del relato. Era una especie de confesión sobre lo que habría pasado con los autores o con las propias historias. Al final de cada libro, hay un epílogo en el que cada autor explica por qué decidió reescribir o dejar su historia tal y como la había escrito. Es una especie de confesión hacia sus lectores”, explicó a ContraRéplica, Nicolás Cuéllar, uno de los dos miembros fundadores y director editorial deDharma Books Un hijo virtuoso, de Jaime Mesa, o Las buenas costumbres, de L.M. Oliveira, son algunos de los títulos que integran esta ambiciosa colección de Dharma Books.
Ambas novelas fueron rehechas por sus
autores en un ejercicio literario de introspección y sinceridad.
“Creo que los escritores intentaron
hacer era buscar el verdadero corazón de cada una de las novelas”, agregó.
El lector nuevo que descubra estos
libros hallará historias que desafían la época y que lanzan preguntas sobre las relaciones y obsesiones personales.