Nación
POR MARÍA CABADAS
Al Partido Revolucionario Institucional (PRI) le duele el corazón y el alma porque ha habido un desencanto tanto de la sociedad como de la militancia y sólo sanará con el reencuentro, con la capacidad de debatir y discutir y recuperando la unidad, señaló el exrector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y aspirante a la dirigencia nacional del tricolor, José Narro Robles.
▶ “En estos días, he recibido palabras de aliento de muchos que fueron y que ahorita no participaron o de algunos que siguen estando, pero que se sienten dolidos. Y ahí está la dolencia, no está en otra parte, está en el alma y en el corazón. Después de que termine el proceso de elección, tenemos que asegurarnos de que se dé ese reencuentro, esa reconciliación”, dijo el también extitular de la Secretaría de Salud.
¿Cómo lograr esa unidad, después de los resultados obtenidos el 1 de julio pasado?
Una vez de que termine el proceso de elección y que se cumpla en todas sus etapas, con todas las reglas que aprobemos, tenemos que trabajar y esforzarnos para que se dé esa unidad, pero con varias condiciones: la inclusión.
Un partido político como cualquier institución grande y representativa, debe prevalecer la pluralidad y un partido que no la tiene, es dogmático. Y no queremos eso. La pluralidad representa fuerza, fortaleza, opciones, capacidad, alternativa interna. Entonces, unidad quiere decir, inclusión, tolerancia y respeto por quien piensa diferente a nosotros. Con estos elementos, podre-mos motivar el reencuentro con la sociedad, con los ciudadanos.
¿Cómo ve al PRI en estos momentos?
Hace unos meses era el partido que estaba en el Gobierno, que había obtenido más de 18 millones de votos, en 2012, y que tenía una representación en el Congreso mucho más grande con la que actualmente cuenta. Esta fuerza tiene una representación nacional, una capacidad de organización y que obtuvo poco menos de 9 millones y medio de sufragios en la elección de diputados en 2018. Así que estamos hablando de un instituto político que tiene fuerza, historia, presencia y sin duda en estos momentos tiene futuro.
¿Cómo recomponer en estos momentos al tricolor cuando la gente ya no cree en los partidos?
Esta pérdida de confianza es un fenómeno que no es exclusivo de México, es mundial. Pero ahí también están las fallas que han tenido los políticos que han desencantado a sectores importantes de las sociedades. El mensaje de julio de 2018 fue claro: hacer una política distinta, una manera diferente de comunicarse con los ciudadanos para responder sus demandas. La sociedad está cansada de las simulaciones. Y por eso, este proceso del PRI para renovar su dirigencia tiene que ser ejemplar, de lo contrario se va a fallar. La militancia debe tener toda la libertad para elegir.
Hay versiones de que el Presidente quiere imponer al nuevo dirigente del PRI, ¿qué opina al respecto? Yo he escuchado al Presidente decir que está muy lejos de su interés, de su intención, involucrarse y participar, lo ha dicho con mucha contundencia y yo le tomo la palabra… yo le creo.
¿Cuál sería su balance sobre estos poco más de 100 días de la actual administración federal?
Es poco tiempo, no llevamos ni cuatro meses de Gobierno y pues aún no se puede hacer una valoración. ¿Qué me gustaría decir a mí y con toda convicción? Parte del producto y logro de los gobiernos emanados del PRI, ha sido la creación y fortalecimiento de las instituciones y lo que deseo es que tengamos una consolidación real de ellas.
El Revolucionario Institucional reúne muchos de los mejores momentos de la historia de México de 90 años, pasó de ser un partido de estado, uno dominante para llegar a ser uno como los demás, que gana o pierde elecciones. Al partido lo dirigió el general (Lázaro) Cárdenas y aquí han estado don Jesús Reyes Heroles, Luis Donaldo Colosio, quienes han sido ejemplo de compromiso social, visión de Estado.
A mí, me inspira mucho Colosio. Lo conocí y trabajé con él, me impulsó en mi desarrollo. Hay una frase en un discurso de Reyes Heroles al tomar posesión como dirigente del CEN del PRI que me motiva: “Con las instituciones todo, el cambio de las mismas incluida, contra las instituciones, nada”. Lo que tenemos que cuidar, es la vida institucional de la República.