Por Javier Torres
Una demanda débil está llevando a los empleadores en Estados Unidos a despedir más trabajadores, con una cifra extraordinariamente alta en nuevos pedidos de ayuda por desempleo que apoya pronósticos de un retorno a la recuperación que podría tardar años.
El número de trabajadores que solicitaron el apoyo por desempleo disminuyó levemente a 1.48 millones la semana pasada, la décimo segunda caída consecutiva y una señal de que los despidos se están desacelerando pero aún están en un nivel alto.
La disminución constante de las solicitudes sugiere que el mercado laboral ha comenzado a sanar lentamente de la pandemia, que cerró las empresas y envió la tasa de desempleo hasta el 14.7% en abril, su nivel más alto desde la Gran Depresión.
El miércoles, la nación estableció un récord de nuevos casos de coronavirus, superando los 2.3 millones de contagios. Muchos estados están estableciendo sus propios registros de infecciones diarias, incluidos Arizona, California, Mississippi, Nevada, Texas y Oklahoma. Los casos de coronavirus también han aumentado en Florida y Georgia.
Imagen: Reuters