El Presidente Andrés Manuel López Obrador deslindó de responsabilidades al gobernador de Sinaloa, Quirino Ordaz Coppel, por la fuga de 51 reos del penal de Aguaruto, luego del “operativo fallido” en Culiacán en el que se ubicó a Ovidio Guzmán, hijo de Joaquín “El Chapo” Guzmán.
"En el caso del Gobernador no tiene responsabilidad, esto fue una decisión y un operativo del Gobierno federal, de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), o sea, no tiene ninguna responsabilidad", dijo.
En conferencia matutina, refirió que los presos que huyeron sometieron a los custodios de la cárcel y "no hubo resistencia", por lo que se tomó la decisión de despedir al jefe de custodios.
Justificó que por mucho sigilo que haya en las investigaciones y operativos contra delincuentes, "siempre hay filtraciones", motivo por el cual "no fueron con tantos elementos" al operativo en Culiacán.
Redacción ContraRéplica
Foto Cuartoscuro