Las comisiones unidas de Educación y de Administración Pública Local con opinión de la de Ciencia, Tecnología e Innovación, analizarán las iniciativas presentadas, por separado, por los diputados Víctor Hugo Lobo (PRD) y Lilia María Sarmiento (PT), para crear la Ley de Educación, Ciencia, Tecnología e Innovación de la Ciudad de México.
Lobo Román propuso una Ley integrada por 207 artículos, distribuidos en 15 Títulos, entre los cuales se integra un capítulo específico de sanciones y recursos, así como el marco de convivencia y colaboración entre las autoridades educativas y los padres de familia; el reforzamiento de mecanismos de investigación e innovación, involucrando a la comunidad científica de esta ciudad.
“En cuanto al ámbito de las tecnologías de la información y la tecnología en general de nuestra ciudad, la propuesta ofrece certeza en el funcionamiento y los procesos que han venido fortaleciendo al sector y que nos tienen en los altos índices de competitividad a nivel nacional” dijo.
Agregó que de acuerdo con el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), “la ciudad es la única calificada con competitividad alta, debido a que destaca por ser una entidad incluyente, con buenos resultados en materia educativa y de salud, así como su desempeño económico financiero y telecomunicaciones y su capacidad para relacionarse con el resto del mundo para generar conocimiento y para innovar”.
En tanto, la integrante del grupo parlamentario del PT, Lilia Sarmiento, consideró que la “educación debe ser un proceso transversal que se interrelacione con las diversas aristas que coadyuven al crecimiento y desarrollo sustentable de nuestra ciudad”.
Es por lo que su propuesta de ley incluye los principios básicos universales establecidos en el artículo 3 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y en el 8 de la Constitución Política de la Ciudad de México, en cuanto al derecho a la educación obligatoria, gratuita, laica e intercultural.
De la misma manera, que en la capital se garantice el libre acceso, uso y desarrollo de la ciencia, la tecnología y la innovación, la plena libertad de investigación científica y tecnológica, así como a disfrutar de sus beneficios.
Redacción Contra Réplica.
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