A
pesar de ser médico, José Manuel Mireles, delegado del ISSSTE en Michoacán, carece de ética y demuestra que la diferencia entre haber sido vocero de las autodefensas, luego haber estado preso hace cinco años en un Penal de Sonora, donde lo defendió una abogada, Thalía Vázquez y ahora ser funcionario, es más que abismal y no está dispuesto a transitarla.
Resulta inimaginable que en una
primera ocasión, Mireles Valverde haya utilizado expresiones misóginas en contra de las mujeres a quienes ve como objetos y luego de que le exigieron una disculpa pública, haya vuelto a cometer exactamente el mismo error; entonces se limitó a retractarse por sus redes con un muy sentido “¡lo siento!”, porque no dio la cara.
Esto ha generado un círculo vicioso
alrededor del exauto defensa en el que no estaría mal que la Secretaría de la Función Pública, que encabeza Irma Eréndira Sandoval, ahora que ha abierto una investigación en contra de este funcionario del ISSSTE, hurgara en su pasado, pues al parecer Mireles proviene de una familia en la que la figura del hombre tenía la connotación del macho y era la que prevalecía.
Además, ante lo evidente, la SFP no
tendría mucho que analizar ya que está más que claro que Mireles violó abiertamente el Código de Ética de las Personas Servidoras Públicas del Gobierno Federal, que en uno de sus muchos puntos establece que un funcionario que se precie de serlo debe “evitar cualquier situación que pueda implicar una conducta antiética o dañar la imagen de la institución”.
Por otra parte, dentro de los objetivos del Código de Ética del ISSSTE,
se consigna que sus funcionarios están obligados a ofrecer, “pautas de comportamiento que fortalezcan los compromisos y responsabilidad social que tienen los servidores públicos de ISSSTE con sus derechohabientes, la sociedad y en general, con los elementos del entorno con los que interactúan”.
En otra parte del Código de Ética
del Instituto, se refiere que a través de los Órganos de Control Internos, “los casos de incumplimiento serán sancionados sin excepción con las medidas administrativas y/o sanciones correspondientes, con base en el análisis y la evaluación de las condiciones y circunstancias de la infracción y en función de la gravedad del hecho”.
▶ Desde la Comisión
Permanente del Congreso de la Unión, la Comisión de Igualdad de Género emitió un pronunciamiento, señalando a Mireles por haber ejercido violencia de género y subrayando que “las disculpas públicas no son suficientes”.
Por lo anterior, no deja de llamar la
atención que respecto a este caso, la Secretaría de la Función Pública no tenga la certeza de cuánto tiempo se llevará esta investigación y cuál será la sanción a aplicar a José Manuel Mireles.
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