El desempleo, pese a recuperación gradual, mantiene entorno incierto: Banxico

En 2021 la economía mexicana seguirá enfrentando un entorno incierto asociado a la evolución de la pandemia Covid-19, “tanto a nivel global como nacional, a la duración de las nuevas restricciones a la operación en diferentes sectores, a la evolución que presente la demanda por diferentes bienes y servicios y a la aplicación de las vacunas”.

“La actividad económica permanece por debajo de los niveles previos a la pandemia”, así lo señala el Banco de México (Banxico) en su Programa Monetario 2021 que por Ley debe entregar al Gobierno federal durante el primer mes de cada año.

En el documento se anticipa que la economía nacional seguirá recuperándose de forma gradual, pero también anticipa que “existen retos importantes para la reactivación de la demanda agregada… se prevé que las condiciones de holgura sigan mostrando una amplitud considerable” a largo plazo pero irán disminuyendo gradualmente.

“La evolución de la inflación ha estado sujeta a choques considerables y con efectos en diferentes sentidos, lo cual impone retos y disyuntivas a la conducción de la política monetaria.”

La Junta de Gobierno del banco central cita que “respecto del mercado laboral, de manera congruente con la gradual reactivación de las actividades productivas y la mayor movilidad de las personas, diversos indicadores registraron una mejoría a partir del tercer trimestre del año. No obstante, el nivel de ocupación también permanece por debajo del registrado antes de la pandemia”.

El Artículo 51 de la Ley del Banxico establece que se debe enviar al Ejecutivo federal y al H. Congreso de la Unión una exposición de los lineamientos a seguir en cuanto a la conducción de la política monetaria para el año correspondiente, por lo que en cumplimiento a esto y al objetivo: “el Estado tendrá un banco central que será autónomo en el ejercicio de sus funciones y en su administración”, el documento se publica.

El Banxico establece como guía de política monetaria que “es necesario permitir los ajustes necesarios en la economía para impulsar la reactivación de la actividad productiva y del empleo, mediante la flexibilidad en la asignación de recursos y procurando un funcionamiento microeconómico eficiente”.

Y agrega que se debe corregir los problemas institucionales y estructurales que han propiciado bajos niveles de inversión y productividad y continuar con el esfuerzo de fortalecer el estado de derecho, abatir la corrupción y combatir la inseguridad, para lograr un mayor dinamismo económico, lo que permitirá generar mejores oportunidades de desarrollo y un mayor bienestar para toda la población, especialmente, en el más largo plazo.

“A su vez, los menores precios de la energía y el debilitamiento económico resultado de la pandemia condujeron a que la inflación general disminuyera en la mayoría de las economías y se ubicara en niveles inferiores a las metas de sus bancos centrales. “Asimismo, los efectos de la pandemia propiciaron un deterioro importante en las condiciones financieras globales, principalmente en marzo y abril, provocando una recomposición en los portafolios de los inversionistas hacia activos de menor riesgo”, refiere el documento.

Respecto de las decisiones de política monetaria, durante 2020 el Banxico redujo en 300 puntos base el objetivo para la Tasa de Interés Interbancaria a un día, marcada a partir de septiembre en 4.25%, en las reuniones de noviembre y diciembre la tasa de referencia se mantuvo sin cambio.