POR CARLOS JIMÉNEZ
Fueron alrededor de 50 disparos. Se usaron armas largas y cortas. Asesinaron de manera directa a dos hombres originarios de Israel.
Dejaron a un policía baleado. La gente
que estaba ahí tuvo que tirarse al piso bajo las mesas, los muebles y cubrirse como pudo. Los locales bajaron sus cortinas… así fue la tarde de este martes en la plaza comercial Artz, al sur de Ciudad de México.
Al parecer uno de los hombres
asesinado, es empresario dedicado a las plazas comerciales. El otro lo acompañaba.
▶ En el lugar una mujer
originaria de Tláhuac, fue detenida. Según dijo, ella fue la agresora y lo hizo porque una de las víctimas le fue infiel. La realidad es que las autoridades dudan que esa versión sea real. De hecho, el nombre que les dio la mujer, Esperanza Gutiérrez Rojano, no aparece en sus bases de datos.
Pasaban de las 5:00 de la tarde
cuando la gente que se encontraba en el centro comercial ubicado en Periférico sur, comenzó a escuchar los disparos.
A decir de testigos, en un restaurante se encontraba una mujer y otros
hombres. De pronto se levantaron de su mesa y se encaminaron hacia otra en la que estaban los israelíes Azula y Alon e Israel Azular. Les dispararon de manera directa y luego escaparon.
Testigos aseguran que, al mismo
tiempo, otro grupo intentó robar una relojería. Al parecer fue un distractor para que los guardias del lugar fueran hacía ese negocio, y la ejecución de los dos hombres israelíes pudiera concretarse.
La gente gritaba y se escondía bajo las mesas de los restaurantes o los
anaqueles. Buscaban ocultarse detrás de cualquier cosa. En los pasillos de la plaza dos hombres corrían, una mujer los acompañaba.
Afuera del centro comercial se desató un tiroteo. Ahí hubo intercambio
de balazos en el que se usaron armas largas. Los automóviles de la gente quedaron perforados por las balas. El agente Iván Barrios, de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, recibió un tiro en la nuca y uno en la espalda.
Dos hombres subieron a un automóvil versa en donde ya lo esperaban.
Uno de ellos llevaba un arma larga y
apuntaba hacia todas las personas que hallaba en su camino.
Una mujer fue detenida. Dejó en el
piso una peluca, y ropa que supuestamente se quitó para que no la identificaran. Sus cómplices huyeron.