En una semana detienen a 9 policías delincuentes

Dos policías detuvieron a una joven en su patrulla, pero la llevaron a un hotel y la violaron. Otro par de agentes, traficaba decenas de dosis de cocaína y mariguana en su patrulla. Uno más, era líder de una banda de ladrones de casas…

▶ En la última semana al menos nueve elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) fueron detenidos en diferentes puntos de la metrópoli, cometiendo algún tipo de delito.

Violación, robo de vehículo, hurto a casas, delitos contra la salud, lesiones… fueron algunos de los delitos que cometieron los elementos de la corporación que encabeza Jesús Orta.

Las autoridades les decomisaron sus armas, patrullas, esposas y todo el equipo policiaco que usaban para delinquir. Todos terminaron en el Ministerio Público de la Procuraduría de Justicia de la ciudad.

La semana pasada un juez vinculó a proceso a dos agentes del sector Ángel-Zona Rosa. Los elementos Genero López y David Guerra, detuvieron a una joven, la subieron a una patrulla y la llevaron a un hotel de paso en la colonia Tabacalera. Ahí, a unos metros de su armería, tomaron turnos para violarla.

Días después, dos uniformados de la UPC Plateros fueron detenidos por tener en su patrulla decenas de dosis de cocaína, marihuana y hasta una botella de vodka. A Salvador Piñones y Luis Salinas, los atraparon dentro de su propio cuartel.

El miércoles, un grupo de ladrones de casas fue detenido en la colonia Jardín Balbuena. Amagaron a un matrimonio de la tercera edad, los golpearon y los amarraron. Lo mismo hicieron con sus hijos.

Cuando estaban escapando con el botín, los capturaron. Se trataba de siete delincuentes que fueron detenidos en flagrancia y que eran encabezados por el agente de la Policía Bancaria Industrial, Alejandro García.

En ese mimo sector Merced-Balbuena, en la alcaldía Venustiano Carranza, fueron detenidos dos agentes que se emborracharon afuera de su cuartel, orinaron en la calle y después golpearon a una familia.

Los agentes Mauricio Benavides y Jaime Flores estaban tomando afuera de un cuartel, cuando otro policía pasó caminando acompañado de su esposa e hija.

En ese momento uno de ellos comenzó a orinar en la calle, por lo que el hombre le pidió que no lo hiciera frente a su familia.

En respuesta, fue agredido por los dos elementos. Ambos acabaron sometidos,esposados y presentados en la Procuraduría capitalina.Otro par de agentes fueron detenidos por dos robos. A uno lo atraparon en una motocicleta remarcada, mientras que a uno más lo aprehendieron por quitarle su teléfono a una persona en el metro.