Esculturas-Geométrico minimalistas de Jennifer Troice rescatan valores familiares

En una era en la que el arte teje puentes que se relacionan más con el espectador que con la obra en sí misma, las esculturas geométrico-minimalistas de Jennifer Troice aparecen como una reverencia a las técnicas clásicas influenciadas por el cubismo pero alejadas de esa abstracción, a veces, tan incomprensible para el público.

▶ La artista mexicana de 32 años inició su encuentro con las bellas artes a través de la música cuando apenas era una niña. Aunque fue educada en el estudio del arpa en el Colegio Americano de la Ciudad de México, su pasión por la plástica la descubrió, en el mismo sitio, a los 16 años, y desde entonces se ha especializado en crear piezas en pequeño y gran formato, fundamentalmente de bronce.

“Mi trabajo sigue un estilo clásico realista per no me voy a lo abstracto, es una mezcla de los dos en el que también hay elementos del cubismo. Creo que muchas veces sucede que las piezas demasiados abstractas resultan incomprensibles para el público y, lo que intento hacer es crear figuras que sean identificables, principalmente formas orgánicas en situaciones familiares o de animales”, contó a ContraRéplica la escultura.

Cada una de las piezas en las que Troice trabaja son producto de largos procesos de creación en los que también predomina una inmersión personal inspirada en la familia y en su maternidad.

La creadora asegura que una de sus mayores influencias fue el escultor, pintor y fotógrafo rumano Constantin Brancusi debido a su simpleza y sofisticación.

“Yo tengo un estilo que denominé geometría minimalista, figuras que pese a todo pueden ser fácilmente identificables. Ahora trabajo en un línea que hace referencia a los animales en peligro de extinción.

“Los tiempos de creación pueden ser muy variables, dependen del diseño, del tamaño y del tiempo que dedique a su elaboración. En el diseño de una pieza puedo tardarme hasta tres semanas si le dedico días completos, desde que amanece hasta que anochece, pero a eso hay que sumar el proceso para obtener el molde y finalmente la fundición por lo que el proceso se puede extender hasta por tres meses”, agregó.

Recientemente, la escultura formó parte de un proyecto para promover y rescatar los valores cívicos en el municipio de Cosoleacaque, en Veracruz que rige el alcalde Cirilo Vázquez Parissi.

La idea de la artista de que el arte debe ser accesible a todos los estratos sociales se consolidó con el proyecto en el que se montaron esculturas monumentales.

“Creo que a veces las personas piensan que hay necesidades más importantes que comprar objetos de decoración que pueden estar clasificados como artísticos, por lo que creo que cuando una pieza llega a un espacio público o un museo en el que varias personas pueden entrar en contacto con ella, ya se está cumpliendo una función muy importante, que es la de acercar el arte a todas las personas”

Troice hace de la escultura una aventura donde explota la posibilidad de ajustar la estética de las realidades que la confrontan a su estilo y visión personal. Influenciada por la simpleza y sofisticación de Brancusi, al igual que por el movimiento cubista y sus representantes.