"Este edificio es de un sistema cultural que desapareció”

Reconstruido con cerca de mil 300 piezas de madera, el Salón de la familia Wang conecta el pasado cultural de uno de los artistas chinos más importantes del momento con su realidad política; punto desde el que lanza una crítica implícita ante la falta de libertades que trauman a las sociedades china y mexicana.

El salón reconstruido viga a viga por el artista Ai Wewei, y que ahora forma parte de la exhibición Restablecer memorias, hace referencia a un inmueble que perteneció a una acaudalada familia de comerciantes de té durante la dinastía Ming.

El templo fue usado no sólo para profesar cultos, sino también para hacer negocios o administrar justicia.

El 16 de mayo de 1966, el Partido Comunista de China anunció el inicio de un proceso transformador en la vida política, cultural y económica del país. Su objetivo era limpiar a la sociedad de cualquier influencia capitalista y el pensamiento burgués.

Para Ai, significó la destrucción de un sistema cultural en el que creció.

“Estos edificios antiguos pertenecen a un sistema cultural que ya ha desaparecido. Todo lo que queda de ese sistema y de ese edificio son fragmentos”, aseguró el artista.

En un alarde de ingeniería, el hombre que en 1995 convirtió la destrucción de un jarrón Han de más de dos mil años en arte, reconstruyó viga a viga el pabellón. Ai comenzó a interesarse por la arquitectura tradicional china en 1997, fue entonces cuando vio la construcción a la venta en una visita al hogar ancestral de su padre en la provincia de Zhejiang.

En Restablecer memorias el pabellón, vacío y reducido a vigas y pilares, sirve como recordatorio de los cambios que ha sufrido la sociedad china desde 1949 y cómo perdieron su sentido los símbolos más respetados de antaño. Un gigantesco candelabro moderno aporta una nueva luz. O quizá una crítica sutil a la vulgaridad de los nuevos tiempos.

“No hay nada de la información que contenía esta casa, todo lo que queda son unos pocos huesos, como los restos de un avión”, agregó.

Con la instalación de uno de sus ready-made más ambiciosos y gigantes el artista explora los traumas que deja el olvido, cómo la existencia de un futuro "mejor" desaparece si los símbolos que importan son dejadaos de lado por eso Ai apela a la construcción de una memoria social.

Restablecer memorias se presentará en el MUAC (del 13 de abril al 6 de octubre de 2019) y en el MARCO de Monterrey (del 28 de noviembre de 2019 al 8 de marzo de 2020).