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El Parlamento griego aprobó el acuerdo entre ese país y Macedonia para que esta nación cambie su nombre a Macedonia del Norte.
La Unión Europea celebró la decisión como un “ejemplo de reconciliación para Europa”; con esto se pone fin a 28 años de disputa diplomática entre ambos países y abre la puerta a la ahora República de Macedonia del Norte a la Unión Europea (UE) y a la Alianza Atlántica.
La disputa se remonta a 1991 y a la desintegración de Yugoslavia, cuando una república yugoslava se convirtió en una nación independiente, adoptando el nombre de Macedonia, el mismo que llevaba una región del norte de Grecia.
Sin embargo, la decisión se logró por mayoría absoluta, con el respaldo de 153 de los 300 diputados de la Cámara, después de varios días de debate y a pesar de que en las últimas encuestas el 62 % de los griegos se mostraban en contra del cambio de nombre.