La Guardia Urbana de Barcelona aconsejó a los establecimientos del centro de la ciudad que esta tarde cierren durante la manifestación.
La indicación se ha tomado hoy mismo ante la posibilidad de que esa zona del distrito del Eixample, la que está siendo más castigada por los disturbios ocasionados tras la sentencia del Tribunal Supremo del procés, vuelva a ser el foco que atraiga las acciones de los más radicales.
Después de la quinta noche de disturbios en los que ha ardido un millar de contenedores -uno de los principales objetos para hacer barricadas e incendios-, el Consistorio ha decidido retirar todos estos objetos del mobiliario urbano de las calles de la zona cero de las protestas violentas.
La factura ocasionada por los destrozos, de momento y solo por ese concepto, es de más de dos millones de euros.
No se contabilizan ahí ni los semáforos dañados ni las señales de tráfico que han desaparecido, ni otros objetos del mobiliario urbano, como marquesinas de transporte público.
Esta mañana también se colocaban planchas de madera como cierres provisionales en oficinas bancarias que fueron vandalizadas en las últimas horas.
Con información de Agencias
Imagen Reuters