Se nos viene el fin de semana y un par de días para descansar de lo habitual y salir a las calles con otra actitud: la de observar.
Si te gusta la fotografía e incluso
eres de los que salen los sábados o domingos con tu cámara o tu celular listo para fotografiar lo que ve, debes de conocer el trabajo de este fotógrafo.
Moisés Levy es un arquitecto mexicano que se ha dedicado a producir
fotografías Fine Art desde 1990, un estilo de fotografía limpio y sumamente estético que busca a los ojos más expertos para que adornen sus paredes con este tipo de trabajo.
En realidad, pensé que Moisés era
extranjero, primeramente porque su cuenta en Instagram y su web está en inglés, y segundo, por sus tipos de paisajes.
Esta imagen, extraída de su serie
Tropical Silhouttes, me pareció la más adecuada para cerrar esta semana y arrancar el fin de semana.
El trabajo de Moisés me gusta
porque se tiene mucha confianza a la hora de salir con su Sony y captar la cotidianidad a su alrededor, sobre todo la de las calles y en las playas.
Basta con ver cómo coloca a los hombres o mujeres que se le interponen
en el camino.
Elige uno como primer plano y después espera para recrear. Como este
ejemplo que aquí vemos, el hombre descansando después de haber salido del mar, mientras una pareja pasa frente a su vista.
En verdad no sabemos si los ve, o
solo está perdido en ese hueco que deja el andar entre el señor y la mujer que va detrás de él, perdido en el horizonte del mar.
Me gustan los fotógrafos que nos
hacen buscar la historia, o bien, darle vida a una historia que quizá nunca fue contada así.
La famosa connotación de la semiología de la imagen, el qué interpreto
yo y qué das por entendido tú.
▶ Porque quizá el hombre y
la mujer, quienes ocultan la dirección de su mirar, estén viendo el cuerpo atlético del joven que descansa sobre la arena.
Tal vez ella le sonríe
indirectamente, como una reacción natural. El instinto, dirían algunos.
Y el señor hace que no ve y pone
ese rostro duro, porque se sabe un hombre de edad con un abdomen muy lejano al que tiene ese joven allí frente a sus ojos. Diría lo mismo, al final, el instinto.
Esa historia en blanco, que nos deja
Moisés me gusta. Pero también puedo decir que no me gusta su edición, repite mucho el tipo de fotos, no selecciona la mujer, sino pone todo de golpe. A excepción de esta, solo hay una.
Para fotos más abstractas utiliza
mucho la postproducción, pero no le niego que son dignas de Fine Art.
Pero lo que más quería yo hoy compartirles, es esta visión, estas ganas de
contar historias a través de las imágenes o simplemente cambiar la perspectiva con la que ven las cosas.
Al final es fin de semana y les diría, sigan su instinto.