Debido a la contingencia sanitaria por el COVID-19, las escuelas se han visto obligadas a trasladar sus clases a Internet, sin embargo, no todos los docentes fueron instruidos acerca de como llevar a cabo la tarea, por lo que sus jornadas laborales han aumentado.
El 20 de marzo se avisó que ya no habría regreso a las aulas hasta que se calmara la pandemia, por lo que las escuelas dieron la orden a los maestros de grabar pequeños videos de entre 8 y 10 minutos, en donde explicaran los temas a sus alumnos, algunos no sabían como hacerlo por lo que incluso tuvieron que sacrificar su periodo vacacional por Semana Santa.
La elección del material didáctico, asegurarse que los alumnos comprendan los temas, la grabación y edición de los videos se ha convertido en una tarea que llega a tomar hasta 5 o 6 horas extra a las jornadas diarias de los profesores.
“Los espacios que tienes en tu casa no son destinados originalmente para dar una clase desde la iluminación, el ruido, tener una conexión cerca. En los salones tienes espacios definidos, tienes tu proyector, tu pizarrón, en tu casa a lo mejor encuentras un lugar donde te sientes cómodo pero no hay conexiones cerca” comento una de las docentes.
Aunque, los maestros ven el confinamiento como una posibilidad para mejorar como docentes desarrollar nuevas aptitudes.
Anna Lorena Sánchez
Información de Reporte Indigo
Imagen Tec de Monterrey