La desverguenza de Fox

Columnas miércoles 08 de mayo de 2019 -

Es muy poco tiempo de la nueva administración federal para lo que vimos en la Ciudad de México el pasado domingo: miles de personas haciendo suyas las principales avenidas, Paseo de la Reforma una de ellas, en protesta ante las acciones y decisiones asumidas por el Presidente Andrés Manuel López Obrador que consideró son consecuencia de que ya no se permite la corrupción y de poner por encima a los más pobres de este país.

No puedo asegurar si detrás de la marcha que había sido anunciada de silenciosa y que finalmente estalló en gritos de inconformidad que alcanzaron la exigencia de renuncia de López Obrador, estén los prianistas como señalaron los defensores del Presidente, lo que si vi y me provocó una enorme molestia, fue observar a Vicente Fox con manta en mano criticando al actual jefe del Ejecutivo.

Ahora sí como dice el propio López Obrador, con que autoridad moral el expresidente Fox se lanza a la calle a protestar por las medidas gubernamentales del tabasqueño cuando su gobierno se caracterizó por la corrupción de su familia y por la persecución política en contra del entonces Jefe de Gobierno. ¡Es una desvergüenza!

Una marcha ciudadana, no organizada por ningún partido político, tenía que mancharse con la presencia del expanista, quien, por cierto, se ha beneficiado con la administración lopezobradorista que le regresó el cuerpo de seguridad que pagamos todos los mexicanos.

Tampoco puedo afirmar, como aseguran en dependencias de la cuarta transformación, que la marcha estaba llena de conservadores que no quieren al primer mandatario López Obrador porque se han visto afectados económicamente por sus recortes o por no poder seguir adelante con la corrupción que ya el propio Presidente la diagnosticó como una enfermedad.

Lo que si puedo señalar es que no es una buena señal que a tan solo seis meses de Gobierno Andrés Manuel López Obrador tenga una marcha en su contra, lo cual debe servirle de reflexión independientemente de si en esta manifestación callejera eran solo sus adversarios.

Si no los ve ni los escucha como hicieron sus antecesores con el propio López Obrador, crecerá el número de personas en su contra y de cinco, 10 o 15 mil que ahora salieron a la calle se duplicará o triplicará la cantidad de mexicanos que le van a exigir renuncie al cargo de Presidente de México.

El mismo López Obrador se puso una trampa que puede significarle quedarse a medias en su objetivo de construir una cuarta transformación: la revocación de mandato. No debe olvidar que en la pasada elección presidencial ganó porque el voto se dividió entre otros partidos, en 2021 sólo preguntará si quieren que continúe o se vaya a su finca y ni los 30 millones que lo hicieron presidente lo salvarán.

•Egresada de la escuela de PCSG. Exdiputada

constituyente. Defensora de los animales y fundadora

de "Ángeles Abandonados".