De la Copa América se está hablando hasta en la Copa Oro. La ausencia de México no pasa desapercibida al menos en nuestra región, y ante la obligación de tener que jugar el torneo de CONCACAF, tanto el TRI como sus rivales han expresado opiniones al respecto.
Ya hace unas semanas Gerardo Martino, tan sobrio y calmado como siempre, decía sin medir palabras que sin duda le gustaría estar jugando la Copa América este verano. Por supuesto, este discurso se incrementó durante los pasados días cuando en los juegos de preparación se completó el póker de partidos ganados a selecciones sudamericanas por el combinado azteca. Y es entendible, con ese ánimo todos nos envalentonamos a revivir esa polémica (un poco barata) de exigir un cambio de Confederación.
Está claro que eso está lejos de suceder. Es más fácil que CONCACAF y CONMEBOL se unan, a que la ‘conca’ deje ir a su principal atractivo tanto deportivo como económico. Y esa fusión obviamente luce imposible, así que imagínense lo otro.
Debemos admitir que la Copa América no es perfecta. Cuántas veces no nos hemos quejado de los ‘procesos’ de CONMEBOL. Basta recordar sus sorteos de Copa Libertadores que duran como 3 horas y son aburridos, engorrosos y pesadísimos para los espectadores. Es además la Confederación de los ‘robos’ a clubes mexicanos cuando disputaban dicho torneo. En fin, que al menos cuando los mexicanos han estado en sus torneos no todo es miel sobre hojuelas.
Pero nadie niega la calidad que se ha generado en esas selecciones. Tan solo Brasil y Argentina son equipos de la élite mundial, más allá de los títulos que pueden haber perdido en los últimos años. Ni qué decir de Uruguay, que retomó su estatus como excampeón de la Copa del Mundo. Otros han tenido sus generaciones doradas. La de Chile está pasando, así como en algún momento la tuvo Ecuador o Paraguay, o Colombia que igualmente ha retomado aires ganadores.
Recuerdo bien cuando, previo a la edición del 2015 en tierras andinas, la CONMEBOL presumía que aunque el mejor futbol a nivel de clubes está en Europa, son los jugadores latinoamericanos la sangre que le da color a ese futbol, y cada Copa América es el pretexto perfecto para juntar a todos ellos y ponerlos a jugar cerca de su gente, de su público.
Hoy resulta raro ver a Japón y Qatar en este evento, si bien no es la primera vez que hay invitados asiáticos al torneo. Y es aquí donde volvemos a extrañar al TRI. Aquellos fanáticos casuales que no suelen ocuparse de confederaciones y organizaciones, podrían ver como natural que México u otros equipos de CONCACAF estén presentes en un torneo de nombre ‘América’, que hace referencia a todo un continente.
Así las cosas, mientras seguimos fantaseando con el regreso, hay que conformarnos. Con ver al TRI en Copa Oro, y echarle un ojo a la Copa América, aunque sea desde lejos.
•Periodista y analista deportivo
alex.lindoro@gmail.com