POR REDACCIÓN
Nicolás Maduro ordenó a la Fuerza Armada capturar sin vacilación a los “traidores”, luego del fallido alzamiento militar encabezado por el presidente encargado de Venezuela, Juan Guaidó.
“Si surge un traidor, (hay que) capturarlo inmediatamente. ¡Es una orden: capturarlo inmediatamente!”, clamó el mandatario venezolano en un acto con el Alto Mando militar y miles de soldados en el estado Carabobo (centro-norte).
En ese contexto, Maduro expresó que “en este tiempo, se decide entre la libertad y la soberanía o entre volver a la esclavitud colonialista”. “Ahí está el centro de las definiciones”, añadió.
El líder chavista llamó igualmente a “activar” los sistemas de armas “para hacerle imposible al imperialismo cualquier aventura”, anunció.
A raíz de la sublevación, 14 diputados opositores han sido imputados. Uno de ellos, el vicepresidente del Legislativo, Edgar Zambrano, fue arrestado y los demás se encuentran refugiados en sedes diplomáticas o en la clandestinidad.
Desde que se juramentó como presidente el 23 de enero pasado, luego de que el Legislativo declaró usurpador a Maduro, Guaidó ha hecho constantes llamados a la Fuerza Armada a dar la espalda al gobernante.
Washington se ha sumado a los pedidos del dirigente, ofreciendo levantar sanciones a los militares que desconozcan a Maduro. Sin embargo, en la ceremonia de este martes, bautizada “Marcha por la lealtad”, los principales jefes militares ratificaron su respaldo al oficialismo.
“Aquellos que se autoproclaman no comandan ni a una piedra”, expresó el jefe del Ejército, general Jesús Suárez Chourio, en alusión a Guaidó.
El ministro de la Defensa, general Vladimir Padrino, declaró la “lealtad sublime de la Fuerza Armada a las leyes, la Constitución y a nuestro comandante en jefe”, así como al “legado” del fallecido ex presidente Hugo Chávez.
Tras la declaración de Padrino, tanques de guerra hicieron disparos de salva en honor de Chávez.