Reveladores fueron los resultados dados a conocer por ContraRéplica en su encuesta de alcaldías; aunque en casos como el de Venustiano Carranza, sólo se confirma que a veces los cacicazgos, como el caso de la dinastía Moreno, tarde que temprano salen a relucir.
Y es que, en esta segunda gestión al frente de esa jurisdicción, Julio César Moreno fue reprobado por 53.04 por ciento de los habitantes de esa alcaldía, de acuerdo con una muestra de la población.
Sin duda, la inseguridad y corrupción son los flancos que los hermanos Moreno (Israel y Julio César) siempre han tenido y no han empleado voluntad política para enfrentarlos.
Conforme a la nota de María Cabadas, el Boletín Estadístico de la Incidencia Delictiva en la Ciudad de México correspondiente a abril de este año; refiere que en la citada alcaldía se registraron 36 delitos por cada kilómetro cuadrado.
En la zona que gobierna Moreno, fueron reportados durante ese mes un total de mil 203 ilícitos, entre los que destacan los delitos contra el patrimonio, con 731; contra la familia, 155; contra la libertad y la seguridad sexual, 29; contra la sociedad 196, y contra la vida y la integridad personal, 81.
La encuesta indica que Moreno tuvo una aprobación de 46.96 por ciento, mientras que 53 por ciento le puso menos cinco; 20 por ciento, 6 y 7; 9 por ciento, ocho, y 18 por ciento, 9 y 10. Ante este panorama, de inseguridad que no es único en Venustiano Carranza, pero sí, de los más preocupantes, se suma el político, ya que Julio César Moreno, a pesar de ser el único perredista que gobierna en la capital, no cuenta con el respaldo de su partido, es visto con desprecio y hasta lo califican de “chaquetero”, según nos dicen en el todavía sol azteca capitalino.
Los Chuchos no le perdonan que haya sido fiel a ADN y están conscientes que, de abrirle el mínimo espacio en Morena, los abrirá, aunque también queda pendiente saldar cuentas con Estela Damián a quienes los hermanos Moreno hicieron ver su suerte.
Por cierto, nos recordaron que todavía está vigente el litigio de la Suprema Corte de la Nación, que en 2017 causó el cese de Israel Moreno como jefe delegacional en esa demarcación.
Y es que, en un hecho inédito, el Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, de manera unánime, resolvió separar de su cargo y consignar ante el Juez de Distrito de Procesos Penales, al extitular de la Venustiano Carranza; además de consignar al anterior titular de la misma demarcación, José Manuel Ballesteros, para que fueran juzgados y sancionados por incumplir una sentencia de amparo y reinstalar a un trabajador.
Este caso está en suspenso, sobre todo, para determinarse una posible expulsión del PRD de Israel Moreno, eso dicen, quizá sólo es por espantar.