POR RUBÉN MACHAEN

Dos días después del aterrizaje en Caracas de dos aviones de la Fuerza Aérea Rusa con personal y equipos militares, el secretario de Estado de Estados Unidos (EU), Mike Pompeo, sostuvo una conversación telefónica con su homólogo ruso, Serguei Lavrov, a quien advirtió que la administración de Donald Trump “no se quedará de brazos cruzados mientras Rusia exacerba las tensiones en Venezuela”.

Las palabras de Pompeo llegan poco después de que el enviado especial de EU para Venezuela, Elliott Abrams, sostuviera una reunión con el viceministro de exteriores ruso, Serguei Riabkov, en Roma, sobre la crisis política venezolana en la que, si bien no llegaron a ningún acuerdo, Abrams afirmó que se logró “un mejor entendimiento de la posición de ambas partes”.

La información fue difundida mediante un comunicado del Departamento de Estado de EU, cuyo texto estipula que “la continua inserción de personal militar para apoyar al régimen ilegítimo de Nicolás Maduro, arriesga la prolongación del sufrimiento del pueblo, que apoya de forma abrumadora al presidente interino, Juan Guaidó”.

A las declaraciones de Pompeo, se sumó el senador republicano Marco Rubio, quien vía Twitter advirtió que las acciones de Rusia constituyen un “desafío directo a nuestro interés nacional y representa una amenaza directa para nuestra seguridad nacional” que “debe y estoy seguro, será abordado”.

Pompeo recalcó que la presidencia interina de Guaidó es reconocida por más de 50 países del hemisferio occidental, por lo que instó a Rusia a poner fin a su “comportamiento no constructivo” y se una al resto de los países democráticos que apoyan a la oposición venezolana.

Por su parte, el asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Bolton, afirmó que “Maduro ha perdido el apoyo del pueblo venezolano, por lo que confía en el apoyo de Cuba y Rusia para usurpar la democracia y reprimir a civiles inocentes”. Agregó que la llegada de dos aeronaves rusas a Caracas muestra que maduro “se está volviendo aún más temerario y se está aislando más”.

Para Stephanie Henaro, analista geopolítica y miembro del Consejo Mexicano de Asuntos Internacionales, la llegada de aviones rusos a Venezuela en diciembre pasado y esta semana “es prueba fehaciente de que Venezuela es un conflicto global en donde las potencias rivales disputan su hegemonía”.

También el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, declaró que la emisión de sanciones y comunicados ha sido muy larga, por lo que instó a la comunidad internacional a tomar nuevas acciones. Sobre esto, el abogado constitucionalista, Juan Manuel Rafalli, afirma para ContraRéplica que desde la reunión de Abrams y Riabkov y la llegada de dos aviones rusos a Venezuela, “la posición de Almagro puede volver a ser discutida en el seno de la OEA”. a oposición”.

Henaro coincide en que dadas las circunstancias “los pronunciamientos puedenejercer cierta presión, pero "no son suficientes”.