POR LUCIANO FRANCO
Morena y sus aliados dieron anoche los votos
con los que la panista Laura Rojas se convirtió en presidenta de la Cámara de Diputados, con una mayoría calificada de 349 votos a favor, 42 en contra y 37 abstenciones, apenas unas horas antes de que “la carroza se convirtiera en calabaza”, como advirtió por la tarde Porfirio Muñoz Ledo, en referencia al riesgo de entrar a una crisis constitucional, si no se definía el cargo antes de la medianoche.
▶ La lista completa de la Mesa
Directiva aprobada, y que estará en funciones hasta el 30 de agosto de 2020, la encabeza la panista de 43 años de edad, Laura Rojas, y en las vicepresidencias fueron reelectos Dolores Padierna, de Morena, Dulce María Sauri, del PRI, y el propio Marco Adame, del blanquiazul.
De esa manera se zanjó el cabildeo
que protagonizaron desde hace unas semanas en San Lázaro particularmente Morena y los panistas, quienes tuvieron que cambiar su fórmula hasta en tres ocasiones, hasta complacer a la bancada mayoritaria.
En el capítulo de cierre, ayer, un tercero en discordia, el líder de los diputados del PRI, René Juárez, declaró, en
medio de la crisis, que, si Morena quería en la presidencia de la Cámara “a un diputado con perfil puro de sangre y espíritu, tendrá que ir a Marte a conseguirlo”.
La combinación que propuso el
PAN y que finalmente logró convencer a Morena y sus colegas legislativos, presentó a Rojas para la presidencia de la Cámara, y la ratificación en la vicepresidencia del morelense Marco Adame, quien era el favorito de los morenistas para encabezar los trabajos en San Lázaro.
Rendida la protesta de ley por parte de la panista nacida en la Ciudad de
México y avecindada en el Estado de México, cuando el presidente saliente Porfirio Muñoz Ledo se dirigía a la curul que le corresponde, lo hizo en medio de una atronadora ovación y el coro de “Porfirio…Porfirio…Porfirio…”, con lo que quedó claro que no hay el menor rencor por la mentada que les lanzó a sus colegas.
Laura Rojas, en su primer mensaje,
agradeció la confianza y afirmó que “asumo con la voluntad de ejercerlo con el más alto sentido de institucionalidad, imparcialidad y respeto a la pluralidad política configurada por la voluntad del pueblo de México en esta Cámara de Diputados”.