Por Andrea Shalal, Reuters y Redacción
El Banco Mundial reportó que la contracción económica de México al cierre de 2020 fue de 9 por ciento, y no de 10 por ciento como calculó en octubre pasado; para este año que inicia la estimación de crecimiento permanece igual a la de hace dos meses, de 3.7 por ciento; aunque para 2022 la previsión retrocede de 2.8 a 2.6 por ciento.
La organización global presentó el documento “Perspectivas Económicas Mundiales”, y en éste cita una proyección de recuperación para México con base en una mejora de las exportaciones, por el repunte de la economía de Estados Unidos y la entrada en vigor del nuevo tratado comercial de Norteamérica (T-MEC).
En el documento se anticipa que la economía mundial crecerá 4 por ciento este año, después de haberse contraído 4.3 por ciento en 2020; pero advierte que el aumento de las infecciones por Covid-19 y los retrasos en la distribución de la vacuna pueden limitar la recuperación a sólo 1.6 por ciento este año.
El pronóstico semestral del Banco Mundial mostró que el colapso de la actividad debido a la pandemia de coronavirus fue ligeramente menos grave de lo que se había pronosticado antes, pero la recuperación también podría ser más moderada y todavía está sujeta a un considerable riesgo bajista.
"Las perspectivas a corto plazo siguen siendo muy inciertas… Un escenario a la baja en el que las infecciones sigan aumentando y se retrase el despliegue de una vacuna podría limitar la expansión de la economía mundial al 1.6% en 2021."
Con un control exitoso de la pandemia y un proceso de vacunación más rápido, el crecimiento mundial podría acelerarse hasta casi el 5 por ciento.
Se espera que el producto interno bruto agregado de los mercados emergentes y las economías en desarrollo -incluida China- crezca 5 por ciento en 2021, tras una contracción de 2.6 por ciento en 2020. Excluyendo a China, los mercados emergentes y las economías en desarrollo crecerían 3.4 por ciento en 2021 tras una contracción de 5 por ciento en 2020. China crecería 7.9 por ciento este año tras una expansión de 2 por ciento en 2020, sostiene el Banco Mundial.
Para América Latina y el Caribe en conjunto se prevé que la actividad económica regional crezca 3.7 por ciento en 2021, a medida que se flexibilicen las iniciativas para mitigar la pandemia, se distribuyan vacunas, se estabilicen los precios de los principales productos básicos y mejoren las condiciones externas.
“Parece que la economía mundial entró en una recuperación moderada, pero los encargados de la formulación de políticas se enfrentan a desafíos enormes, en materia de salud pública, gestión de la deuda, políticas presupuestarias, banca central y reformas estructurales, al tratar de asegurar que esta recuperación mundial, aún frágil, cobre impulso y siente las bases de un crecimiento robusto”, explicó el presidente del Grupo Banco Mundial, David Malpass.
“Para superar los impactos de la pandemia y contrarrestar los factores adversos que afectan las inversiones es necesario dar un gran impulso a la mejora del entorno empresarial, aumentar la flexibilidad del mercado laboral y de productos, y reforzar la transparencia y la gobernanza”, concluyó Malpass.