POR LAURA ARANA
Con la renuncia del exdirigente Carlos Romero
Deschamps, al menos nueve grupos se disputan la toma de nota del gremio petrolero de México, aunque será la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, a cargo de Luisa María Alcalde, quien tendrá la última palabra, misma que hasta el momento no se ha pronunciado.
Los candidatos a la dirigencia
del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM) que han alzado la mano
son: Manuel Limón, secretario del interior del sindicato, segundo en la toma de nota acreditada y actual sucesor de Romero Deschamps.
María de Lourdes Díaz, del
Movimiento Nacional de Transformación Petrolera; Sergio Carlos Morales, del Frente Nacional Petrolero; Mario Rubicel Ross, trabajador activo del gremio; Raúl Calderón, de la sección 11; Yolanda Morales, del Sindicato Petroleros de México (Petromex) y Omar Aburto, coordinador de las plataformas de Pemex en el Golfo.
Así como Eliel Flores Ángeles,
del Sindicato Nacional de Trabajadores de las Empresas Productivas del Estado; así como Jorge Hernández, de los disidentes del sindicato de los Trabajadores del Complejo Petroquímico Independencia.
Sin embargo, en entrevista con
ContraRéplica, el catedrático de la UNAM, Arminio Castillo, apuntó que Manuel Limón es el actual líder interino y podrá, si así lo desea, convocar a elecciones hasta
2024, cuando venza el plazo de la toma de nota por la que fue acreditado Carlos Romero Deschamps en septiembre del año pasado y que fue otorgada por la Secretaría del Trabajo por un plazo de 6 años.
Dijo que es viable que hasta
esa fecha modifiquen los estatutos para que haya elecciones libres y secretas, lo que podría ser factible, ya que implicaría la renuncia de los 36 líderes sindicales, gente que es allegada al exdirigente.
La segunda opción es la cuestión política, que la Secretaría del
Trabajo revoque las tomas de nota que se les dio en 2018. Y la tercera vía es que la asociación minoritaria, Petromex, demande la titular
del colectivo de trabajo, “argumentando que ya tiene la mayoría de los trabajadores. Superando al actual sindicato. “Sólo así podrían convocar a elecciones libres”.
Adelantó que tiene que haber
un cambio radical en el sindicato, pero tiene que ser legal, más que político, por lo que explicó de acuerdo con la Constitución, en la Reforma Laboral permite que los líderes que tengan años o décadas,
pueden ser reelegidos, “pero ojo, estos antes eran nombrados por levantada de mano, ahora puede ser democrático”.