Digamos, aceptemos, que a nuestra Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, no le está yendo así que digas súper bien en todas las áreas. Es necesario ejercer la autocrítica, camaradas, y bueno, hayan un par de terrenos que se nos están complicando a los chilangos. La contaminación ambiental, por ejemplo.
O la seguridad pública. Es normal. Como hemos señalado antes en este espacio, nuestro Presidente Eterno realmente no necesita colaboradores. Ya lo dijo la camarada Irma Eréndira: el Estado es él, perdón, Él, y en su condición de hombre-Estado es que puede fungir a un tiempo de secretario de Hacienda, secretario de Economía, secretario de Seguridad Pública y director de Pemex, con los espléndidos resultados que todos conocemos. Bien, pues así como no necesita un gabinete, nuestro Padre de Pueblos no necesita Jefx de Gobierno en
la Ciudad de México. Y no obstante, con la generosidad proverbial que lo distingue, el Gran Benefactor permite que algunos de sus apóstoles ocupen cargos en la 4T, como una oportunidad para recibir un poco de su luz, aprender de esa magnificencia, y al mismo tiempo cobrar un sueldito, caso de nuestra Clau. Y no solo eso: nuestro Padre, aquí y allá, se da tiempo de corregir los errorcillos de sus apóstoles, con un método 100% austeridad republicana; es decir, muy barato y súper eficaz: echar porras.
¿Que a nuestra Clau se le salió de las manos la seguridad pública? ¿Que se dispararon las extorsiones, los homicidios y sobre todo los secuestros? Fácil: nuestro Líder aclara que “la maltratan unos grandulones, abusivos, ventajosos”, y acto seguido invita a corear: “No estás sola, no estás sola”. ¿Notaron la tranquilidad instantánea que invadió a los chilangos?
Bien, pues esa fórmula, me parece, puede y debe empezar a usarse en múltiples contextos y con diversos miembros del gabinete.
▶ ¿Que a Tata Jiménez Espriú, después de esa montaña malintencionada, neoliberal, le apareció un basurero tóxico neoconservador en Santa Lucía? No hay bronca.
Te trasladas a la zona y, altavoz en mano, entonas un “Goooooya, goooooya”, en honor a sus orígenes pumas.
¿Que tu titular de Semarnat tiene un tropiezo y dice que las aspas generadoras de energía le quitan lo democrático al oxígeno e impiden que las comunidades indígenas respiren? No problem. Te vas, por ejemplo, a una mina de carbón y gritas un “Chiquitibum”.
¿Que la curva de aprendizaje de Manuel Bartlett está como que prolongándose y ya se va la luz en todas partes? Pas problème: “Manolooooo, ¡bien! Manolooooo, ¡bien!”
¿Que en general hay problemas en Pemex, Relaciones Exteriores, Seguridad, Cultura y Energía? Pues fácil: antes de empezar cada mañanera, entonas, junto con los youtubers de izquierda, un “¡Vamos, equipo, vamos a ganar!”.
Pero no solo de pan y porras vive el hombre: hacen falta otras recompensas.
Por eso, como todos los viernes, entregamos la Orden de Macuspana al funcionario que haya cosechado más méritos durante la semana. Esta vez, pese a los esfuerzos de Marcelo Ebrard, la presea va para Jesusa Rodríguez, que clama por cortar los subsidios a los creadores desde la firmeza que da el sueldo de una curul para la que no fue elegida con votos.
Todos juntxs: “¡Denme una jota! ¡Denme una e!...”.