Producción de crudo cae a mínimo histórico en julio

El crudo producido en México tocó un mínimo histórico en julio con 1,605 millones de barriles por día (bpd), una ligera caída respecto a junio tanto para la estatal Pemex como para las firmas privadas, lo que pone al sector petrolero del país en camino de su producción más baja desde la década de 1970.

Pemex produjo solo 1,548 millones de bpd en julio y las compañías privadas bombearon alrededor de 57 mil bpd en ese lapso, ambas cifras levemente por debajo del mes precedente, según datos dados por la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH).

La información de julio marca la menor cantidad de crudo extraído desde noviembre de 1979, cuando Pemex extrajo 1,615 millones de bpd, según datos de la Secretaría de Energía (Sener).

La producción ha disminuido cada año desde que alcanzó un máximo de 3.4 millones de bpd en 2004 y se vio afectada más recientemente por una caída del precio del crudo, rebajas presupuestarias y un recorte de dos meses negociado con el grupo de potencias productoras de petróleo conocido como OPEP+.

Desde principios de este año, la producción de crudo de México ha caído casi 7 por ciento, según datos de la CNH.

En julio, Pemex bombeó alrededor del 96 por ciento de la producción nacional, según la CNH, mientras que los operadores privados, como la italiana Eni y la canadiense Renaissance Oil Corp, aportan alrededor del 4 por ciento.

Por la implementación de un programa emergente de intervención en campos y pozos potencialmente redituables, se logró detener el declive acelerado de la producción de Pemex, destacó el Segundo Informe del presidente Andrés Manuel López Obrador.

De acuerdo con el documento, del 1 de septiembre de 2019 al 30 de junio de 2020, Pemex perforó 184 pozos, de los cuales 163 son de desarrollo y 21 exploratorios. Entre septiembre del año pasado a junio, la producción de petróleo crudo y gas natural sin nitrógeno promedió un millón 690 mil barriles diarios y 3 mil 769 millones de pies cúbicos diarios de gas.

El texto señala que para poder detener la tendencia de declinación y lograr estabilizar el nivel de producción se concreta una intensa actividad de mantenimiento a pozos y optimización de instalaciones.

Pese a la estabilización en la producción nacional, el Segundo Informe se expone que tuvo que disminuir su producción por dos factores: la reducción en la demanda de combustibles, como consecuencia de las medidas para contener la pandemia del covid-19 y los excesos de inventarios de petróleo que obligaron a la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y socios a acordar una reducción en la producción mundial de petróleo, en la que México se comprometió a reducir 100 mil barriles diarios de producción del 1 de mayo al 30 de junio de 2020.

Aunque el promedio en el periodo septiembre 2019 a junio de 2020 es positivo, de acuerdo con los últimos indicadores de Pemex, la producción de petróleo sufrió su mayor caída en el mes de julio desde hace más de 41 años.

El documento cita otro factor económico: el precio del barril de la mezcla mexicana de exportación, el cual registró un decremento de 47.7 por ciento durante el periodo del 1 de septiembre de 2019 al 30 de junio de 2020, y que excede las bajas registradas en las cotizaciones del West Texas Intermediate.