POR FERNANDO MORENO
El director técnico uruguayo, Diego Alonso, fue destituido de su cargo ayer por la directiva de los Rayados de Monterrey, con lo que se convirtió en el séptimo timonel que pierde su cargo en el actual torneo de Apertura 2019, esto luego de que en el partido de la Jornada 12, cayera 2-0 ante el máximo rival, los Tigres de la UANL, en la edición 123 del Clásico Regio.
En el actual certamen dejó cinco
encuentros ganados, un empate y seis descalabros, lo que mantiene a los Rayados en el puesto 12 de la clasificación general, con 16 puntos.
Lamentablemente para el equipo
del norte, los malos resultados terminaron por ejercer presión para la decisión que se tomó en torno a su salida el club, mismo al que llegó en Junio del año pasado, además de la derrota en casa ante los hidrorayos del Necaxa, que dejó como resultado un contundente 2-0, donde incluso un sector de la tribuna comenzó a pedir la salida del estratega.
Por lo anterior, Diego Alonso forma
parte de una larga lista de entrenadores que no lograron concretar su proyecto en diversos clubes del futbol mexicano, como por ejemplo, Tomás Boy, quien era el más reciente con Chivas, Pedro Caixinha con Cruz Azul, Alfonso Sosa, Enrique Meza, Javier Torrente y José Luis Sánchez.
Con esta destitución, la peor racha
de despidos en el balompié nacional está a punto de igualarse, pues solo faltan tres entrenadores destituidos más, para igualar la marca que se registró en los torneos de Apertura 2005 y de Clausura 2019, es decir, apenas el certamen pasado, en el que se quedaron en el camino 10 directores técnicos.