El Presidente Andrés Manuel López Obrador rechazó que exista una confabulación de su Gobierno y autoridades judiciales en contra de la ex secretaria de la extinta Secretaría de Desarrollo Social, Rosario Robles.
Lo anterior al referirse a la carta que se difundió ayer, en la que la ex funcionaria le pide al Ejecutivo un juicio justo y apegado a derecho.
“Lamento mucho todo esto. Nosotros no tenemos la intención de perjudicar a nadie. Lo dije desde mi toma de posesión, no es mi fuerte la venganza (pero) no podemos detener procesos iniciados, en este caso se trata de denuncias presentadas con anterioridad”, dijo.
Desde Mérida, Yucatán, donde se llevó a cabo la mañanera, insistió en que su Gobierno no confabula, ni persigue a nadie por venganza y que corresponde a las autoridades judiciales investigar las denuncias.
“Ya lo que era la Procuraduría General de la República no depende del Presidente como fue durante décadas, siglos, que el Presidente era el jefe del procurador, eso ya se terminó, ahora lo que era la procuraduría es la fiscalía y el fiscal es autónomo, tiene independencia dijo que no depende del Presidente de la República y en este caso hay injerencia del Poder Judicial”, señaló.
López Obrador dijo que la decisión de la Secretaría de la Función Pública de inhabilitar a Robles Berlanga es un asunto administrativo que no tiene nada que ver con una repercusión en el asunto judicial que enfrenta también la ex funcionaria.
Redacción ContraRéplica
Foto Cuartoscuro