De continuar con “remedios superficiales, ocasionales y dulzones” para abatir la inseguridad, se estaría apostando a una violencia mayor en el país, advirtió la Arquidiócesis de México, encabezada por el cardenal Carlos Aguiar, que señaló que el Gobierno federal debe garantizar la paz y defender los derechos y la seguridad de todos y no solo expresar señalamientos “retóricos tan fáciles y tan oficiales como ‘no criminalizaremos la protesta’”.
“Actuar no es sinónimo de reprimir.
Actuar como autoridad democrática es garantizar la paz, defender los derechos y la seguridad de todos. Lo otro es una omisión hipócrita de responsabilidades elementales”, externó.
Titulado “No más violencia contra la mujer”, en el editorial que se difunde en el semanario Desde la Fe, la jerarquía eclesiástica rechazó además la llamada Ley Garrote que fue aprobada hace unas semanas en Tabasco, para que cuerpos policíacos actúen contra quienes se manifiesten contra la creación de la obra de Dos Bocas, en ese estado.
“Una mano dura que tome el camino de la represión –sea abierta y pública, o escondida y hasta legalizada como
la llamada “ley garrote”- es tan reprobable como una mano blandengue que ignore el camino de responsabilidades y derechos, que diga que va a arreglar todo con abrazos amorosos o tolerando impunidades selectivas “, indicó.
María Cabadas