Rechazan presiones en los programas del Invi

En respuesta a la carta del extitular del Instituto de Vivienda (Invi), Pedro Sosa, la Jefa de Gobierno capitalino, Claudia Sheinbaum advirtió que ni presiones ni chantajes hay dentro de su administración.

La mandataria local puntualizó que, “tomamos una buena decisión.

Pedro es un buen técnico, pero cada quien decide cómo se comporta, cómo hace las cosas, tiene sus posiciones.

No estamos presionados por chantajes ni mucho menos”.

▶ Añadió: “Nuestro compromiso es acabar con la corrupción en el Invi”, esto luego de la presentación del programa de monitoreo y geolocalización del transporte público en Iztapalapa.

La mandataria enfatizó que aquí lo más importante es el proyecto de dicho instituto e insistió en terminar con la corrupción y generar mejores condiciones para la vivienda social.

Recordó que durante estos dos años “vamos a dedicar una buena parte de los recursos a la reconstrucción, y a partir del tercer año aumenta el presupuesto del Invi, aunque este año tiene pues casi 2 mil 600 millones de pesos”.

Al ser cuestionada sobre si en su administración persiste la política clientelar respondió: “No. Estamos acabando con eso, ese es el objetivo, aquí al objetivo es que la ciudadanía tenga una relación directa; hay dos proyectos muy simbólicos que inician durante este año en el Instituto de Vivienda, que me comprometí en campaña, que son Atlampa y Ciudad Perdida de Tacubaya”.

Explicó que en este caso es directamente el Invi quien está haciendo el padrón y quien va a hacer los proyectos sin ningún intermediario.

Apuntó que dicho organismo es una institución muy noble e indicó que hay muchas organizaciones sociales que generaron y fueron partícipes de esta corrupción, y aquí lo importante es acabar con las clientelas y acabar con la corrupción, ese es nuestro objetivo y vamos a salir adelante.

Manifestó que el problema fue lo que se generó entre esas organizaciones y el gobierno y eso es lo que se est acabando ya que el Invi es una institución que tiene mucha relación con la ciudadanía y tiene que haber mucha compresión al ciudadano, puertas abiertas. Agregó que la renuncia de Sosa no va a aplazar los trabajos. Sosa destacó en la carta que grupos minoritarios los agredieron sistemáticamente. Incluso, la semana pasada organizaciones sociales acudieron al Antiguo Palacio de Ayuntamiento a reclamar por las reglas de operación en materia de vivienda.