La posible implementación de una jornada laboral reducida en México podría disparar los niveles de informalidad en la ciudad de León hasta un 70%, así lo advirtió Alejandro Arena Barroso, presidente de la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo (Canaco Servytur) de la localidad.
Actualmente, el índice de informalidad en León ronda el 60%, sin embargo, de acuerdo con el representante empresarial, una disminución en los días laborales podría generar un incremento de hasta 10 puntos porcentuales. Esto situaría al municipio en niveles comparables con entidades como Michoacán, donde la informalidad laboral es considerablemente más alta.
Arena Barroso señaló que el impacto sería especialmente crítico para las pequeñas y medianas empresas, predominantes en el municipio. “Estas unidades económicas no podrían absorber los costos que implicaría la reducción de jornada, lo que empujaría a muchos a la informalidad para mantenerse operativos”, alertó.
El dirigente empresarial subrayó que el sector servicios sería uno de los más golpeados por la medida. Si bien una distribución de las horas laborales en seis días podría mitigar los efectos, la opción de descansar dos días implicaría un aumento significativo en los costos operativos y una merma en la competitividad del comercio local.
Según datos actuales, León cuenta con más de 423 mil empleos formales, de los cuales 94 mil pertenecen al sector comercio y cerca de 129 mil al sector servicios. Estos dos rubros representan más del 52% del empleo formal en la ciudad, por lo que cualquier cambio en la normativa laboral tendría un impacto considerable.
Arena también destacó que muchas grandes empresas ya operan con semanas laborales de cinco días, por lo que no se verían afectadas en igual medida. “Los que respaldan esta iniciativa son generalmente corporativos que no enfrentan las mismas condiciones que los pequeños negocios, quienes sí requieren operar todos los días del año para sobrevivir, como ocurre en los sectores turístico y restaurantero”, concluyó.