POR LAURA ARANA
Albergues y organizaciones civiles alertaron sobre el riesgo que representa la intención del Congreso y Gobierno federal de desaparecer el Seguro Popular, ya que dejaría a la deriva a miles de migrantes, incluso a aquellos connacionales que son expulsados de Estados Unidos y retornados a México.
▶ Desde 2014, el gobierno del expresidente Enrique Peña Nieto autorizó que por 90 días —tiempo estipulado en el que se aclara la situación legal en nuestro país—, las personas migrantes sean afiliados al Seguro Popular.
Al respecto, en entrevista para ContraRéplica, el director de Casa Migrante Saltillo, Alberto Xicoténcatl, pidió al Gobierno federal reconsiderar la propuesta de eliminar el Seguro Popular, ya que es un gran apoyo que hoy en día reciben los migrantes.
“Tienen una asistencia médica de 90 días, que, aunque es muy limitada, es una valiosa ayuda. Y es que tenemos un problema con personas con enfermedades crónicas o que tienen accidentes muy graves, por lo que si se está discutiendo en el Congreso o el Presidente la continuidad del Seguro Popular, nosotros ponemos sobre la mesa el preguntar qué va a pasar con las personas migrantes y se tiene que entrar en el debate sobre cómo se van a proteger en temas de salud”, acotó.
De acuerdo con Transparencia, la Comisión Nacional de Protección Social en Salud en su informe de enero a junio, que tienen en su poder est diario, se han afiliado al Seguro Popular 14 mil 395 mexicanos que fueron expulsados por Estados Unidos y a su llegada a nuestro país recibieron atención médica. Mientras que en 2018, fueron alrededor de 20 mil 278 mexicanos que fueron devueltos por su incondicional ilegal en Estados Unidos y que también recibieron este apoyo.
Mientras que el director del Seguro Popular en Baja California, Alejandro Monraz, aseguró en días recientes, que ya se otorgaron 10 mil afiliaciones en la entidad, principalmente a centroamericanos que llegaron a Tijuana y Mexicali, así como a repatriados “pero también ha incrementado la población haitiana, la procedente de África y ya hay registros de gente de Camerún, de Nigeria”.
Para apreciar la dimensión de la comunidad indocumentada proveniente de otras naciones, y que pudieran necesitar de atención médica, se encuentra el informe que dio la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar), respecto a que 39 mil 983 migrantes centroamericanos solicitaron refugio en México, por lo que están a la espera de que se les resuelva su condición ilegal. También la Comar prevé que a finales de año las peticiones lleguen a 80 mil.
Por ello, Gretchen Kuhner, directora del Instituto para las Mujeres en la Migración, inció que “si se quita el Seguro Popular, tienes que empezar de nuevo con un programa de apoyo que es útil. El Gobierno tiene que crear mecanismos accesibles, porque si te piden documentación que nadie tiene, pues nadie podrá acceder”.
También el informe de 2019 de la Comisión Nacional de Protección Social en Salud indica que de acuerdo con la Encuesta Nacional de Dinámica Demográfica (Enadid) del Inegi, entre 2009 y 2014, cerca de 1 millón de mexicanos y sus familias regresaron de Estados Unidos a México. “Según el Censo de Población de los Estados Unidos, en el mismo periodo, más de 870 mil personas ingresaron a ese país provenientes de México”, destacó.
“Las causas de la migración desde el lugar de origen y las características socioeconómicas se reflejan en el estado de salud de las personas al iniciar la migración”.
La Organización Mundial de la Salud señaló que los problemas de salud que frecuentemente presentan los migrantes son lesiones accidentales, hipotermia, quemaduras, accidentes cardiovasculares, complicaciones del embarazo y parto, diabetes e hipertensión.