Trump deporta a 13 mil; esperan asilo en México

Después del plazo de 45 días que México logró con Estados Unidos para detener el flujo migratorio hacia sus fronteras, y que evitó la imposición de aranceles por parte del presidente Donald Trump, el país vecino en 10 días retornó a México, 3 mil 27 centroamericanos niños y adultos que esperarán ya en territorio mexicano la oportunidad de asilo, dando un total de más de 13 mil ilegales de enero a junio.

Fue el 7 de junio cuando el primer mandatario DonaldTrump anunció acuerdos con México en dicha materia y canceló la imposición de 5 por ciento de aranceles como resultado de las pláticas que encabezó el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard; hasta esa fecha, se reportó del 29 de enero al 5 de junio, un total de 10 mil 393 centroamericanos que fueron devueltos a nuestro territorio para que esperen la entrevista que les dé una oportunidad de cruzar al otro lado.

▶ Sin embargo, del 7 de junio al 17 de junio, la cifra se elevó con 3 mil 27 centroamericanos repatriados, dando un total de 13 mil 420 centroamericanos que ya esperan en territorio mexicano desde el 29 de enero, fecha en que se dio la primera devolución por parte de Estados Unidos.

El retorno se realizó por el puerto fronterizo de El Chaparral en la ciudad de Tijuana, Baja California, donde fueron deportados 4 mil 784 personas; de Garita Mexicali, 2 mil 930 personas; y Reforma en Ciudad Juárez, Chihuahua, 5 mil 706 personas centroamericanas.

Con base en el reporte del Instituto Nacional de Migración, la dependencia informó que el día 29 de enero del presente año, el Inami por razones humanitarias, “recibió en territorio mexicano al primer extranjero centroamericano que solicitó asilo a EU. Hasta el 8 de abril, fecha que se suspendió esta práctica por parte del gobierno estadounidense, se registró un total de mil 323 internaciones a México en las ciudades de Tijuana y Mexicali en Baja California, así como Ciudad Juárez, Chihuahua, de personas que han solicitado asilo a EU.

Posteriormente se reanudó la internación de centroamericanos por los puertos fronterizos de Baja California y Chihuahua, dentro de la iniciativa del vecino del norte de retornar a territorio mexicano a nacionales procedentes principalmente de Honduras, Guatemala y El Salvador.