Tan sólo en el periodo del 8 al 23 de julio, el 56 por ciento de los días se rebasaron los cien puntos Imeca de ozono y las autoridades ambientales no decretaron la contingencia, como ordenó el juez cuarto de distrito en materia administrativa a partir de un amparo que solicitó Greenpeace.
Ante ello, el responsable de los temas de calidad del aire de Greenpeace México, Pablo Ramírez, subrayó que, “Si bien el resolutivo del juez señala que podrán no decretar las contingencias, esto es siempre y cuando se justifique caso por caso públicamente el por qué y se tomen medidas alternativas para garantizar la protección de la población y esto no está sucediendo”.
Agregó que, “esto es más la decisión de la Comisión Ambiental de la Megalópolis (CAMe) de anteponer los intereses económicos de la capital y nos habla de una grave displicencia de las autoridades por el cuidado de la salud de la población”.
Ramírez reveló que las normas de salud ambiental tienen como objetivo establecer el límite máximo permisible de cada uno de los contaminantes en el aire para garantizar la salud de la población.
“Estos límites no los pone Greenpeace, se establecen con base en evidencia científica, toxicológicay epidemiológica, por lo cual es muy importante que se respeten y garanticen”, sostuvo.
Jonathan Bautista