POR MARÍA CABADAS
El racismo supremacista es alimentado por el mandatario estadounidense Donald Trump, quien desde que inició su campaña utiliza ese discurso que mantiene a su voto duro, pues la polarización social es un rasgo característico del populismo, sostuvo la secretaria de Asuntos Internacionales del Comité Ejecutivo Nacional del PAN, Mariana Gómez del Campo, quien llamó al Gobierno federal a tener una postura más contundente contra el presidente del vecino país.
“Es tiempo de que el gobierno mexicano haga frente a las declaraciones racistas y xenófobas de Trump, no puede seguir navegando con la bandera de neutralidad frente a las descalificaciones de la Casa Blanca, porque simplemente no es posible llevar una relación cordial con quien insulta a los mexicanos en cada oportunidad. Es inadmisible que nuestros connacionales en Estados Unidos vivan con el miedo de ser de origen mexicano”, indicó.
Dijo que, según un estudio del Centro Selig de la Universidad de Georgia, la comunidad mexicano-estadounidense tiene un poder adquisitivo de 881 mil millones de dólares que representa el 57 por ciento del poder adquisitivo total de los latinos.
“La inmensa mayoría de los mexicanos en EU son emprendedores, no ladrones ni violadores como los ha etiquetado Trump”, señaló.