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POR ALONDRA ESPINOZA
Las Chivas del Guadalajara despiden a un ídolo más. El eterno capitán, Carlos Salcido, disputará su último partido con la playera rojiblanca hoy en el partido por el quinto lugar del Mundial de Clubes ante el Esperance de Túnez, en punto de las 7:30, con el que pondrá fin a su segunda etapa en la institución.
Pese a que Salcido no pensaba en ser futbolista, cuando jugaba a nivel amateur, Ramón Candelario, visor en ese entonces del Rebaño Sagrado, lo descubrió por casualidad a los 20 años. Sa Sa comenzó su carrera en el Estadio Jalisco, un 22 de julio de 2001 cuando ingresó de cambio por Omar Bravo, en un partido entre Chivas y La Piedad.
Desde entonces, por su polivalencia de jugar como central, de adelantarse al medio campo como contención o de tirarse a algunas de las laterales, comenzó una carrera prometedora que lo llevó a la Selección Mexicana, con la que disputó tres mundiales (Alemania 2006, Sudáfrica 2010 y Brasil 2014) y fue medallista olímpico en los Juegos de Londres 2012, ante Brasil con un marcador de 2-1.
Tras probar suerte Europa, con el PSV Eindhoven y jugar por tres años con Tigres, Carlos Salcido regresó para el Apertura 2014 con Chivas, equipo con el que por fin consiguió alzar cinco títulos: dos Copa MX (Ap15 y Cl17), un campeonato de liga del Clausura 2017, una Supercopa (2015-16) y la última edición de la Concachampions.
Su salida del Chiverío, pese a que el defensa de 38 años, aun tenía contrato hasta el verano de 2019, fue anunciada por el mismo equipo a través de una publicación en redes sociales, en la que le agredieron por su trayectoria. Hasta ahora, Salcido no se ha pronunciado al respeto, pero se espera que continúe su carrera con otro equipo de la Liga MX.