Columnas
No podía desaprovechar esta oportunidad, que un país donde gobierna la democracia le extendiera una invitación.
Era el plan perfecto, hacer creer al mundo, primero, que la legitimidad de su gobierno, la cual se sabe de sobra no la ganó por votos, sino porque forma parte del club de naciones democráticas en América Latina, luego de que sus visitas internacionales este año han sido a países socialistas como China y Cuba; antes de venir a México, el Presidente de Venezuela se reunió con Hojattolah Soltaní, viceministro adjunto para América Latina de Irán y el lunes recibió en Caracas en visita de Estado al presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, aliados que se cuentan con los dedos de la mano.
Nicolás Maduro sabía que su presencia en el Palacio Legislativo de San Lázaro no le traería bonos, que le esperaba la realidad que él se niega a reconocer, pancartas de “Maduro no eres bienvenido”, protestas en su contra, gritos de ¡dictador! que en su ausencia se escucharon ante los Jefes de Estado e invitados cuando el Presidente López Obrador lo mencionó, él prefirió esperar en su avión hacer tiempo y llegar directo a la comida en Palacio Nacional.
Cuando revisé su cuenta de Twitter para ver las publicaciones del dictador me di cuenta que había sido bloqueada, ¡claro! era de esperarse, porque yo he dado a conocer la realidad de su país que se encuentra en la sala de terapia intensiva, pero para una periodista no hay imposibles ahí pude constatar 26 publicaciones entre tweets y RT sobre su visita a México.
De esos breves momentos, al bajar de su camioneta junto a su esposa frente al Palacio Nacional, donde saludó sonriente y mandó abrazos; su equipo hizo una historia donde el guión fue creado y dirigido por el propio Maduro ahí se escucha una voz en off de una mujer mexicana donde dice:“Presidente Maduro lo respetamos mucho porque es un presidente valiente que nos representa a todos los latinoamericanos en los foros internacionales y es un orgullo contar con su presencia aquí en nuestro país”. ¿Un orgullo?, ¿Para quién? ¿En qué foros internacionales? Sí hay que recordarle al dictador que en septiembre pasado cinco naciones de América Latina: Paraguay, Chile, Argentina, Colombia, Perú y Canadá solicitaron a la fiscalía de la Corte Penal Internacional de La Haya que se investiguen supuestos crímenes de lesa humanidad y abusos a los derechos humanos en Venezuela y en junio la Organización de Estados Americanos (OEA) aprobó una resolución donde desconoce la legitimidad del gobierno de Maduro.
Pero Nicolás logró lo que esperaba, la foto junto al Presidente de México y las esposas de ambos, esto a López Obrador le restó, a Maduro le sumó, aunque nadie le crea, sólo en su mundito.