Nación
Los Gobernadores de Michoacán, Silvano Aureoles, y de Querétaro, Francisco Domínguez, acusaron que el Gobierno del Presidente Andrés Manuel López Obrador nunca les informó sobre las acciones concretas que tendría su estrategia para el combate al robo de combustible, como el cierre de ductos que ha generado una severa carencia de gasolinas en esos y otros estados de la República.
En entrevistas por separado, en la Cámara de Diputados, ambos mandatarios calificaron de “grave” la situación por la que atraviesan sus entidades, y advirtieron que el actual plan y la consecuente escasez de petróleo “ha generado ya protestas entre la población”.
Aureoles señaló que en Michoacán el abasto de hidrocarburo es de apenas 40 por ciento, lo que ha comenzado a generar conflictos de carácter social.
Informó que oficialmente pidió ya al director de Petróleos Mexicanos que diga con claridad cuándo se va a resolver este problema y qué es lo que lo ocasionó, porque “Michoacán ha comenzado a tener problemas económicos muy delicados y se pueden agravar en los próximos días”.
En el mismo sentido se pronunció su homólogo de Querétaro, Francisco Domínguez, quien dijo que a él tampoco le notificaron que habría limitación como consecuencia de la estrategia del Gobierno para frenar el huachicoleo.
Mientras que el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, dijo que en su estado, principalmente en Guadalajara y Zapopan, el desabasto es de alrededor de 70 por ciento, y advirtió que, de acuerdo con el compromiso de distribuir a través de pipas, 94 mil barriles de gasolina diarios, el problema quedaría resuelto en aproximadamente 10 días.
Luciano Franco